Joseba ITURRIA
PARÍS-ROUBAIX

Van Avermaet recoge el testigo de Tom Boonen

El flamenco del BMC ganó su primer Monumento el día en el que se despidió en Roubaix el del Quick Step.

Greg van Avermaet confirmó ayer con su primera victoria en la París Roubaix que es el mejor clasicómano del momento en la prueba que sirvió de despedida de Tom Boonen con una dignísima carrera y un decimotercer puesto a escasos doce segundos de su sucesor en las clásicas.

Tom Boonen se despidió con el cariño de su público a los 36 años con una buena actuación. No pudo entrar en la disputa de la victoria, pero dio la cara en los tramos de pavés y dejó el ciclismo como él quiso tras ganar cuatro París Roubaix, tres veces el Tour de Flandes y la Gante-Wevelgem, seis etapas del Tour y un campeonato del mundo en 2005. Sumó 113 victorias como profesional, catorce en grandes vueltas y 42 clásicas. Debutó con el US Postal en 2002 y desde el año siguiente hasta ayer defendió el maillot del Quick Step.

La carrera de ayer reflejó la cesión del testigo a Greg Van Avermaet, que conseguía su primer Monumento dentro de su gran comienzo de temporada, que le ha llevado casi a sentenciar la general del World Tour cuando apenas se llevan tres meses. Ganó la Omloop Het Nieuwsblad, Harelbeke y la Gante Wevelgem fue segundo en Strade Bianche y Flandes y el triunfo de ayer puso la guinda. A sus 31 años está en su mejor momento y en las grandes clásicas ha superado a su principal rival, Peter Sagan.

Peter Sagan no tuvo suerte

El eslovaco o no tuvo suerte o volvió a equivocarse porque hasta en tres ocasiones tuvo que pararse a cambiar de rueda después de que a 77 kilómetros de meta lanzara la carrera con un ataque que parecía importante junto a su compañero Bodnar, Oss (BMC) y Stuyven (Trek).

La carrera ya venía rápida desde la salida, porque tardó muchísimo en hacerse la fuga y eso provocó que nunca se registrara un parón en el pelotón y que ayer se batiera el récord de la París Roubaix con una media de 45,2 de media en los 257 kilómetros de recorrido. Casi nada.

Van Avermaet también se vio implicado en una caída que le hizo sufrir, pero el BMC consiguió devolver a su líder al grupo de los favoritos y además siempre tuvo por delante a Oss, primero con Stuyven y luego en solitario. A 25 de meta el italiano fue cazado por un grupo en el que entraron su líder, Stybar (Quick), Moscon (Sky), Langeveld (Cannondale), Roelandts (Lotto) y Stuyven (Trek). Los más fuertes fueron Van Avermaet, Langeveld y Stybar, que no colaboró en el trío que se formó en cabeza en los últimos kilómetros, pero no lo aprovechó para batir al flamenco en Roubaix.

Allí acabaron tres de los cuatro vascos participantes. Erviti lo intentó de salida, pero entró en el pelotón de Sagan y Jonan Insausti y Chetout terminaron fuera de control, pero llegaron. El de Bahrain evidenció una mejoría en su nivel porque no había acabado ninguna carrera hasta el miércoles y ayer no entró dentro del control por poco.