Arnaitz GORRITI
ATLETISMO - MUNDIAL LONDRES 2017

¿Habrá alguien que eclipse los últimos fulgores de Usain Bolt?

El jamaicano arranca hoy mismo en las calificatorias de los 100 metros lisos, yse despedirá con el relevo 4x100 metros. La primera final será la de 10.000.

El Campeonato del Mundo de atletismo de Londres ya tiene un titular antes de empezar: la última puesta de largo de Usain Bolt. Si algún nombre propio o algún suceso consigue eclipsar al «rayo» jamaicano, las proporciones de ese atleta o ese suceso deberán ser casi bíblicas, toda vez que las miradas, empezando desde hoy mismo en las eliminatorias de los 100 metros lisos –y la jornada de clausura del día 13–, estarán puestas en Bolt, solamente Bolt y nadie más que Usain Bolt.

Y eso que su participación solo en las pruebas de 100 metros y el relevo 4x100 privará a los espectadores de ver al «rayo» en su prueba fetiche, los 200 metros, y ante una de las pocas estrellas capaces de eclipsar a Usain Bolt en el mano a mano: el sudafricano Wayde Van Niekerk, que tiene ante sí el reto de encadenar las medallas de oro de los 200 y los 400 metros, algo que nadie ha conseguido desde que lo consiguiera el gran Michael Johnson.

Por de pronto, no se va a dar el duelo entre Bolt, Van Niekerk y el botsuanés Isaac Makwala, que con 19,77 segundos lidera el ránking de 2017 en el doble hectómetro. Por desgracia, uno de los principales adversarios de Usain Bolt en los 100 metros, el canadiense Andre De Grasse, subcampeón olímpico en 200 y bronce en los 100 metros en Río 2016, tampoco estará, en este caso por culpa de una lesión en los isquiotibiales.

Pero el «rayo» tampoco estará huérfano de rivales. Bolt llega a Londres habiendo firmado un 9,95 en el mitin de Mónaco, lejos de los 9,82 segundos del estadounidense Chris Coleman, poseedor de la mejor marca del año. El jamaicano Yohan Blake, el sudafricano Akani Simbine y los estadounidenses Cameron Burrell y Christopher Belcher acreditan mejor marca que Bolt este 2017, pero el campeonísimo avisa: «No quiero retirarme perdiendo», y ya sabe todo el mundo que Bolt suele crecerse una vez llegadas las finales.

Mo Farah, adiós al tartán

Las primeras medallas de este mundial se van a repartir en la prueba masculina de los 10.000 metros. Si Usain Bolt es el rey de la velocidad, el rey del fondo sobre la pista es el británico de origen somalí Mo Farah, que buscará en su casa reeditar el doblete de los 5.000 y los 10.000 metros en su despedida al tartán. Después de estos campeonatos, Farah se va a pasar al maratón, algo que ya ha conseguido previamente en los Juegos Olímpicos de Londres 2012 y Río 2016 y los Mundiales de Moscú 2013 y Beijing 2015.

Pero sobre el ambiente no flotan buenas vibraciones en torno a Farah. La Agencia Estadounidense contra el Dopaje –USADA, la misma agencia que acabó por destronar a Lance Armstrong– han puesto en el disparadero a Alberto Salazar y su Oregon Project, y quizá por ello Salazar sea el gran ausente de la prueba de los diez kilómetros de esta tarde, aunque no por ello Farah deje de ser el gran favorito.

Aunque a este tampoco le faltarán rivales de entidad. Uno de ellos, el estadounidense Galen Rupp, medalla de plata en Río y discípulo de Salazar. Con todo, las mejores marcas del año en la distancia son obra de los etíopes Abadi Hadis y Jemal Yimer, que junto con el keniano Geoffrey Kamworor, campeón mundial de cross y subcampeón de 10.000, buscarán endurecer la prueba y derrotar a Farah en su adiós al tartán.

En categoría femenina, la jamaicana Elaine Thompson parece la destinada a brillar en las pruebas de velocidad, aunque en el doble hectómetro la holandesa Dafne Schippers –poseedora del récord europeo de la distancia después de una espectacular final vivida entre estas dos protagonistas hace dos años– volverá a ponérselo más que difícil. Asimismo, entre Allyson Felix, actual campeona del mundo de la distancia, y la bahameña Shaunae Miller-Uibo, la vigente campeona olímpica, se espera una dura pugna en los 400 metros, mientras que la sudafricana Caster Semenya no debiera tener rival en la prueba de los 800. Por contra, el duelo en el triple salto entre la venezolana Yulimar Rojas y la colombiana Caterine Ibargüen promete emociones fuertes.

A vueltas con el dopaje

El dopaje, por desgracia, también tiene su espacio en los momentos previos a que arranque este Campeonato del Mundo. Por un lado, el pasado lunes día 31 la IAAF decidía por abrumadora mayoría mantener la suspensión a Rusia actualmente en vigor por «connivencia con el dopaje».

Solo 21 miembros votaron a favor del levantamiento de la sanción, mientras que 166 apoyaron la propuesta del Consejo Directivo de la IAAF de mantener la suspensión pese a haber apreciado algunas mejoras en el último informe de la comisión de seguimiento. Rusia necesitaba dos tercios de los votos para ser rehabilitada y poder participar con equipo propio en las competiciones internacionales. Ello supone que solo los atletas rusos que han recibido autorización expresa de la IAAF podrán participar bajo bandera neutral.

«Teníamos esperanza y estamos decepcionados con esta decisión», dijo el ministro de Deportes ruso, Pavel Kolobkov, después de que una abrumadora mayoría de los delegados reunidos hoy en Londres votara a favor de mantener la suspensión a la Federación Rusa de Atletismo (FRA).

No solo con Rusia; lo cierto es que los atletas participantes en los Mundiales de Atletismo estarán sometidos a un estricto programa de control antidopaje. Antes del inicio de la competición, se han llevado a cabo 600 análisis de sangre para establecer un «pasaporte biológico del atleta» y detectar sustancias prohibidas, como «la hormona del crecimiento». Cuando empiecen las pruebas, se tomarán en el estadio de Londres unas 600 muestras de orina, que se analizarán para detectar otras sustancias prohibidas, como esteroides y eritropoietina o EPO.

Y este férreo control ya se ha llevado a dos atletas: las ucranianas Olesya Povkh y Olha Zemlyak no podrán competir en los Mundiales, según anunció la Unidad de Integridad del Atletismo (AIU). El comunicado de la AIU precisa que la suspensión provisional impuesta a las dos atletas obedece a «una infracción del reglamento de dopaje por el uso de una sustancia prohibida».

Entre los vascos, será el lanzador de peso Carlos Tobalina el primero en saltar, algo que sucederá mañana. De otro modo, hubiera sido la etíope-donostiarra Trihas Gebre, ya que decidía renunciar pese a tener marca mínima en los 10.000.