Maite UBIRIA BEAUMONT

EL «CASO JON ANZA», DE LA CRUEL REALIDAD A LA FICCIÓN, VÍA FRANCE 3

LA SERIE DE LA CADENA PÚBLICA FRANCE 3 “PLUS BELLE LA VIE” SE PRESENTARÁ ESTA NOCHE ANTE SUS MÁS DE 3 MILLONES DE FIELES CON UN CAPÍTULO QUE INCLUYE UNA SORPRENDENTE ESCENA EN LA QUE UN POLICÍA Y UN PERIODISTA CONVERSAN SOBRE EL «CASO JON ANZA».

Esta noche, la serie de culto de la cadena France 3 hará una breve incursión en la que sus propios guionistas denominan como «zona gris» de los estados y sus policías.

“Plus Belle la Vie” (PBLV) ha entrado en su decimotercera temporada, y se emite, a partir de las 20.25. En su episodio de hoy, que ya puede verse a través de la página web de la cadena (http://bit.ly/2hlTpTa) uno de los personajes del folletón relaciona la muerte del militante vasco Jon Anza con la actividad de «antiguos miembros de los GAL».

El diálogo

La escena transcurre de la siguiente forma. Un periodista y un comisario cruzan confidencias y en un momento de la conversación el primero alude a la desaparición de Jon Anza, en 2009. El hecho de que el periodista narre que el cadáver del militante de ETA apareciera en la morgue de un hospital de Toulouse un año después, sin que en ese tiempo nadie hubiera procedido a su identificación, provoca un gesto de sorpresa de la parte del policía francés.

A partir de ahí gana terreno la tesis de que donde hubo fuego siempre puede quedar brasa. De este modo, se apunta la hipótesis de que la muerte de Anza respondiera al malestar de los sectores más recalcitrantes de las cloacas del estado... por el desarme de ETA… –patinazo de calendario– y por la excarcelación de presos –¿sugerencia de la televisión pública gala a su gobierno para un cambio de política penitenciaria?–.

«Los duros (de los GAL) no han digerido bien que se deje en libertad a antiguos terroristas con el pretexto de que ETA ha entregado las armas», apunta el periodista al comisario.

Cuando éste le cuestiona sobre la eventual implicación del Estado francés en la muerte de Anza… la respuesta es: «No es tan simple, entramos en una zona gris, de golpes bajos, de apaños entre servicios secretos…».

Una serie televisiva de ficción, devuelve de forma del todo inesperada a la actualidad un pasaje oscuro de la historia reciente de Euskal Herria.

Jon Anza fue visto por última vez el 18 de abril de 2009 en la estación de Baiona, donde cogió un tren en dirección a Toulouse. Nunca se ha podido establecer de forma concluyente si el donostiarra llegó a la capital occitana, aunque ETA confirmó a posteriori que no se presentó a la cita puesta por la entonces organización armada. El cuerpo sin vida de Anza apareció casi un año después en la morgue de un hospital de la villa rosa.

La Justicia gala nunca ha esclarecido los interrogantes que pesan sobre el caso, atribuyendo a una cadena de errores la no identificación de Anza. Además, dio un trato cruel a la familia, a la que sólo escuchó en vísperas de que se tomara la decisión de dar carpetazo al caso, contra cuyo archivo se han batido los allegados de Anza y su abogada, Maritxu Paulus-Basurco.

El capítulo de “Plus Belle la Vie” se refiere, sea esa o no su voluntad, a esa tarea pendiente, de verdad, justicia y reparación, cuando su periodista señala sobre el conflicto vasco: «Se dice que todo ha terminado, pero este dossier es muy sensible».