Agustín GOIKOETXEA
SESTAO

Las irregularidades del PAC de Sestao, a la Inspección de Trabajo

Después de años advirtiendo de graves irregularidades en el Punto de Atención Continuada (PAC) de Sestao, que no han sido observadas por Osakidetza, nueve trabajadores de este servicio de urgencias que atiende a 140.000 personas han presentado una denuncia en la Inspección de Trabajo de Bizkaia. La queja, que también está siendo investigada por el Ararteko, se centra en quien ha ejercido hasta hace un año, de manera oficial, la jefatura de esta unidad.

Al grupo de trabajadores del Punto de Atención Continuada (PAC) de Sestao que lleva desde 2014 reclamando a la gerencia de la Organización Sanitaria Integrada (OSI) de Barakaldo-Sestao que ataje las «continuas irregularidades» que ha cometido quien durante veinte años ha ejercido la Jefatura de la Unidad de Atención Primaria (JUAP), las evasivas les han obligado a acudir a la Inspección de Trabajo. Acusan a este responsable de «fraude al erario», con el agravante de que, una vez relevado de sus funciones en enero de 2017, ha mantenido los «privilegios» mientras continúan las graves deficiencias.

El objetivo que persiguen con esa iniciativa, al igual que lo intentaron con otras anteriores, es que Osakidetza se reúna con ellos para abordar cómo se puede mejorar la calidad del servicio público que prestan. Asimismo, reclaman que se revoquen los tres expedientes leves «injustos» abiertos a algunos compañeros y que se actúe contra quien «está robando al erario».

Los nueve promotores de la denuncia son médicos, enfermeros, auxiliares administrativos, celadores y conductores, que aseguran haber sufrido «acoso laboral» mientras reclamaban a Osakidetza «condiciones dignas» con las que poder atender a los 140.000 vecinos y vecinas de Barakaldo y Sestao que dependen del PAC ubicado en Markonzaga.

En la denuncia interpuesta ante la Inspección, exponen que quien detentó la jefatura del servicio hasta hace un año compaginó su empleo en Osakidetza con otras labores en el IMQ y trabajos privados mientras cobraba un plus por dedicación especial, algo que, recuerdan, «era incompatible». Además, desvelan que disponen de pruebas de que el responsable, a pesar de tener establecida una jornada completa, solo trabajó el 29%.

Añaden en la denuncia que, a partir de febrero de 2017, redujo sus guardias a 3 ó 4 al mes, a pesar de que se le han contabilizado entre 8 y 12 guardias mensuales, «de las cuales solo trabaja realmente 3 ó 4 y de esta forma mantiene el salario correspondiente a una jornada que no efectúa en realidad». Esta situación, advierten, «ha sido consentida» por quien le sucedió en el cargo, «que ha aceptado el calendario laboral a pesar de que no se cumple».

Revelan que el antiguo jefe solo desarrolla sus labores lunes y miércoles, «no trabajando sábados ni festivos, ni puentes ni víspera de festivo, a pesar de que dichos días consten como trabajados en su calendario laboral». En julio y agosto, apostillan, tampoco acudió. «Deliberadamente, se atribuye el desempeño de guardias los días 24 y 31 de diciembre, así como el día 1 de enero, cobrando dichos festivos a pesar de no acudir a trabajar», subrayan los denunciantes.

Además, indican que cobró un plus de desplazamiento por acudir a avisos domiciliarios cuando lo hacía con un chófer del PAC, restando capacidad de respuesta ante las urgencias que puedan surgir.

Tras las repetidas denuncias efectuadas por estos nueve trabajadores por todos esos «abusos», exponen que han sufrido «represalias». A raíz de estas, solicitaron reuniones con los responsables de Osakidetza, sin que fuera atendidas.

Tras un escrito fechado el 9 de diciembre de 2016 dirigido a distintas instancias de Osakidetza, solicitando la destitución del responsable del PAC, en enero de 2017 se les informó del relevo en la JUAP. En estos meses transcurridos, destacan que «las irregularidades denunciadas persisten»; de ahí la interposición de la denuncia ante la Inspección de Trabajo de Bizkaia.

Osakidetza, en respuesta a un requerimiento previo del Ararteko, que también investiga el caso del PAC de Sestao, asegura que las irregularidades denunciadas «son solo meras interpretaciones de una parte». Para tratar de desacreditar a estos trabajadores, responde que algunos de ellos no suelen acudir a las reuniones del servicio.

Las Urgencias han estado colapsadas en los últimos días

El grupo de trabajadores que reclama cambios en el PAC de Sestao viene pidiendo un «uso racional» de los recursos materiales y que se dote de los medios humanos necesarios para atender a los 140.000 vecinos y vecinas que dependen del servicio. Citan, como ejemplo, que los primeros días del año han estado «sobrepasados» por el número de pacientes, lo que deja en evidencia la necesidad de cambios.

Los sanitarios explican que el miércoles, por ejemplo, atendieron a 111 pacientes en el Punto de Atención Continuada con el refuerzo de un médico pero sin ATS ni conductor. «Ese día, en San Eloy –añaden– fueron 138 las personas a las que atendió el médico mientras la enfermería lo hizo a 68 pacientes. Es evidente que hay que reforzar la plantilla».

Los denunciantes solo quieren que los recursos públicos se empleen en atender de manera «digna» a los pacientes, para lo que, insisten, hay que ampliar la plantilla. «No hay lista de sustituciones, por lo que se tiende a que el personal haga horas extras, con lo que el servicio se resiente», se quejan. El PAC dispone de 25 trabajadores fijos además de personal temporal.

A la saturación de trabajo que tienen los fines de semana se suma que el PAC también atiende ahora el servicio de hospitalización domiciliaria, que tiene unas características particulares por las que son necesarios más recursos de los actuales. A.G.