En plena ofensiva del Gobierno español contra el modelo de inmersión lingüística en la educación catalana, el Tribunal Constitucional emitió ayer una inusual sentencia favorable a la Generalitat de Catalunya en contra de algunos aspectos de la Ley Orgánica para la mejora de la calidad educativa (Lomce). La misma con la que el exministro José Ignacio Wert proclamó que trataba de «españolizar» a los alumnos catalanes.

Concretamente, el TC estimó algunos de los puntos recurridos por la Generalitat, al considerar que algunos extremos de la norma española contravienen el reparto de competencias entre el Estado y la Comunidad Autónoma. La sentencia declara inconstitucionales, por ejemplo, las ayudas de 6.000 euros a las familias de los menores que, para poder ser escolarizados en castellano, debían acudir a un centro privado. Se trataba de una ayuda ilegal que la Ley española, además, cargaba a hombros de la Generalitat.

Diputados de ERC y PDeCAT en el Congreso de los Diputados consideraron que la decisión del TC es un toque de alerta contra la amenaza al modelo educativo catalán. «Ahora el Gobierno central tiene menos legitimidad para romper la inmersión lingüística», considero el diputado de Esquerra Joan Tardà. A su lado, el parlamentario del PDeCAT Carles Campuzano destacó «el sentido común» de la sentencia del TC y consideró que «la Lomce invade competencias y convalida un sistema extraño y ajeno al modelo educativo catalán», que según dijo, «garantiza que todos los alumnos acaben sabiendo catalán y castellano».