M.I.
HISTORIAS DE UNA INDECISA

El dilema de tener que elegir entre dos amores

E l comediógrafo Eric Lavaine ya había dirigido a la actriz Alexandra Lamy en la reciente “Vuelta a casa de mi madre” (2016), donde establecía un duelo interpretativo con la veterana Josiane Balasko, como la mujer emancipada que pierde su trabajo y ha de regresar a la casa materna. Como la película funcionó muy bien en el mercado francófono, parece lógico que repita otra vez con ella. Antes de eso ya había firmado otros títulos comerciales como “Poltergay” (2006), “Incognito” (2009), “Protéger et servir” (2010) y “Barbacoa de amigos” (2014). Su estilo sigue siendo muy ligero, por no decir vodevilesco. La atribulada protagonista se mete en un sinfín de líos por culpa de su mala cabeza, sin tomar partido hasta el último momento para transmitir su ansiedad al público en clave paródica.

Su patológica indecisión llega hasta tal punto que prefiere que su padre (Lionnel Astier) y sus dos mejores amigas (Sabrina Ouazani y Anne Marivin) decidan por ella. Pero cuando duda entre dos amores (Arnaud Ducret y Jamie Bamber) deberá ser ella la que elija, posponiendo dicha elección hasta el mismo día de la boda. Se trata de dos tipos completamente opuestos, ya que el uno es cocinero y el otro un banquero británico.