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BILBO

Un exviceconsejero, juzgado en el «caso Margüello»

El exjefe de Calidad de Cruces, José Carlos Margüello, marcó distancias con la empresa favorecida presuntamente por contratos de Sanidad de Lakua en 2006. El exviceconsejero Cerdán, también en el banquillo.

El exjefe de Calidad del Hospital de Cruces José Carlos Margüello aseguró ayer que solo tenía una representación «simbólica» del 1% en la empresa Gestión de Servicios Sanitarios XXI, contratada en 2006 para gestionar las listas de espera por el Departamento de Sanidad del Gobierno de Lakua, dirigido entonces por Gabriel Inclán (PNV).

«Nunca me involucré en la empresa, ni de forma previa, ni antes, ni después; ni intermedié con ninguna entidad pública para que le adjudicarán contratos», señaló en el inicio de la vista, que analiza presuntos delitos de prevaricación, malversación, fraudes ilegales contra la administración pública y negociaciones prohibidas a funcionarios públicos.

Junto a Margüello también están acusados María Nieves Fernández, considerada testaferro tanto de la empresa citada como de Rehabilidom, también vinculada a Margüello; el responsable territorial de Bizkaia en esa época, José Ramón Elorriaga; y el exviceconsejero de Sanidad, Rafael Cerdán.

La Fiscalía considera que se cometieron irregularidades en esas adjudicaciones que supusieron una pérdida de 6,8 millones de euros a las arcas públicas y pide para los tres primeros penas de 11 años de cárcel, y 6,5 años para Cerdán, mientras que el Gobierno de Lakua, que también está personado, solo reclama que se restablezca al Ejecutivo lo que estime la sentencia.

En su declaración, Margüello dijo que aceptó entrar en la empresa Gestión de Sevicios Sanitaros XXI por «amistad y apoyo»&flexSpace;a María Nieves Fernández, pero que «nunca» estuvo en el día a día de la empresa, ni cobró de esa sociedad, ni hizo gestiones «formales o informales» para que la administración sanitaria le adjudicase contratos.

Sobre el hecho de que firmó un contrato en nombre de esa empresa con un clínica privada, explicó que se debió «únicamente» a que Fernández estaba de viaje en ese momento, y que no intervino en nada más relacionado con esa sociedad.