Volverán a verse las caras dos viejos conocidos –segundo clásico de Europa– en el máximo torneo continental –Juventus Stadium, 20.45, Antena3–, con viejas rencillas pendientes de por medio. La Juventus querrá resarcirse de lo ocurrido hace diez meses, cuando perdió en la última final de Champions frente a un Real Madrid que viene saliendo malparado en sus recientes eliminatorias frente a los transalpinos, la última en las semifinales de 2015.

Los anfitriones deberán encarar esta exigente ida de cuartos con las notables ausencias de los lesionados Benatia y Pjanic, que serán reemplazados casi con total seguridad por Barzagli y la duda entre Marchisio o Bentancur. No tiene ese problema el preparador blanco, Zinedine Zidane, quien dispone de diez futbolistas fijos, estando la duda en si alinea de inicio a Isco reforzando la medular o incluye a Bale para ganar en velocidad. Lucas Vázquez o Marco Asensio, al alza por sus actuaciones, parecen disponer de menos opciones de ser titulares.

Se contrapone la fiabilidad casera de la Vecchia Signora –27 encuentros europeos seguidos sin conocer la derrota en su estadio– frente a un Real Madrid que vuelve a estar en todas las quinielas de los favoritos tras dejar en la cuneta al PSG de manera contundente.

Quiere seguir haciendo historia

En el otro envite de la jornada, el Sevilla quiere seguir haciendo historia frente al Bayern Münich –Sánchez Pizjuán, 20.45, BeIN Sport–, tras acceder a unos cuartos del primer torneo continental 60 años después. Para aquilatar lo que se encontrará enfrente, los bávaros disputan por séptima vez consecutiva esta eliminatoria, a la que han llegado en 29 ediciones.

Los hispalenses no podrán disponer de una de sus piezas básicas –el sancionado Banega–, por lo que el técnico sevillista, Vincenzo Montella, deberá escoger entre retrasar la posición de Franco Vázquez o sumar más músculo con la presencia de Pizarro. El Bayern llega a Nervión con la moral por las nubes tras endosarle un categórico 6-0 al Borussia Dortmund, lo que le convierte en virtual ganador de la Bundesliga, con Lewandowski en un gran momento goleador –anotó un triplete– y un James en plan estelar.