Iñaki IRIONDO
GASTEIZ

El Parlamento defiende el informe de torturas de los ataques del PP

El Parlamento de Gasteiz defendió ayer el informe sobre torturas dirigido por Paco Etxeberria a petición del Gobierno de Lakua, de los ataques del PP, que lo considera una afrenta al honor de la Ertzaintza y de las FSE. El PP pedía la retirada de dicho informe y el resto de los grupos se opusieron a ello.

El Parlamento de Gasteiz rechazó ayer la petición del PP de que inste al Gobierno a retirar el informe oficial sobre torturas dirigido por el forense Paco Etxeberria y que fue remitido hace meses a la Cámara autonómica. Todo el resto de grupos se opuso abiertamente a ello.

Fue un debate con contradicciones. Porque la portavoz del PP, Nerea Llanos, insistió en que su grupo se opone a la tortura, pero dejó claro a la vez que un informe sobre denuncias lo considera una afrenta al honor de la Ertzaintza y de las FSE.

Sin embargo, al mismo tiempo, Llanos puso sobre la mesa un derivada importante de este informe. Si se da por bueno que ha habido 336 casos de denuncias contra la Ertzaintza, preguntó si se va a abrir una comisión de investigación sobre la materia. Inquirió también si «¿no se va a pedir responsabilidades a los consejeros anteriores?». Y apostilló con un «¿qué pasa, que la porquería va para los agentes y los responsables políticos de la Ertzaintza quedan al margen?».

Por otro lado, el portavoz del PNV, Iñigo Iturrate, fue enormemente beligerante en la posición del PP y del Gobierno español en materia de torturas, por las sentencias recibidas y los informes de organismos internacionales, sin que haya reacción. Acusó a Llanos de que con su iniciativa de ayer el PP pretende «enfangar el terreno para ocultar su falta de compromiso con los derechos humanos», lo que generó protestas en la bancada del PP, que pretendió que Iturrate retirara esta afirmación, sin conseguirlo.

Pero el jeltzale fue mucho más benévolo con la evidencia de que el informe de torturas recoge más de trescientas denuncias contra la Ertzaintza, y se fijó únicamente en la parte del texto que reconoce que la Policía autonómica había introducido elementos de prevención de la tortura, que no hay condenas y que tampoco hay denuncias de organismos internacionales.

En el debate el portavoz del PSE, Jose Antonio Pastor, ya dejó claro que el hecho de que no haya sentencias no supone que no haya torturas. Y fue la parlamentaria del PP, Nerea Llanos, la que recordó que sí hay un informe del Comité Contra la Tortura de Naciones Unidas por falta de investigación que afecta a la Ertzaintza. Fue Julen Arzuaga, de EH Bildu, quien le puso nombre: es la denuncia de Arkaitz Gallastegi.

Arzuaga reprochó al PNV que el informe no se aproveche para profundizar en medidas que eleven los estándares de la Ertzaintza para que no haya nuevas denuncias de torturas en el futuro.

Duras acusaciones a Lakua

En su discurso, el PP fue extremadamente duro con el Gobierno de Urkullu, al que acusó no importarle desprestigiar a la Ertzaintza, para «contentar un grupo que hoy sigue sin condenar el terrorismo».

En el pleno de ayer no estuvo presente la parlamentaria del PP Juana Bengoetxea, que en comisión no dudó de la certeza del informe y luego fue corregida por su partido.

El PSE quiebra un compromiso de la Ponencia

La proposición no de ley del PP constaba de tres puntos. En el primero de ellos pedía a la Cámara respaldar y reivindicar la labor de la Ertzaintza y del resto de FSE «en defensa de los derechos y libertades de toda la sociedad vasca contra el terrorismo de ETA, al que plantaron cara, siendo perseguidos y asesinados por ello». En el segundo, el PP quería que el Parlamento instara «al Gobierno Vasco, en especial al Departamento de Seguridad, a defender el honor de la Ertzaintza frente a cualquier ataque que vaya contra su dignidad». No se puede olvidar que para los autores de la iniciativa el informe de torturas es, precisamente, un ataque a esa dignidad. El tercer punto era el de pedir expresamente la retirada del documento.

En el transcurso del debate, el portavoz del PSE, José Antonio Pastor, pidió que la proposición del PP se votara por puntos. El PSE apoyo los dos primeros apartados de la iniciativa.

Esto supone, por una parte, que el PSE parece entender que el informe encargado por la Secretaria de Paz y Convivencia es un ataque al honor de la Ertzaintza. Cabe recordar que el partido de Idoia Mendia tuvo una reacción muy crítica cuando se presentó el informe, aunque luego ha ido modulando su posición. Ayer Pastor sostuvo que ni se puede negar la existencia de la tortura ni se puede entender este informe como «una especie de verdad revelada» en la que todo sea cierto.

Por otra parte, el voto del PSE supuso una ruptura de un pacto tácito alcanzado en el seno de la Ponencia de Memoria y Convivencia, para rechazar de plano la propuesta del PP. De hecho, ningún grupo parlamentario había presentado ningún tipo de enmienda a la proposición no de ley del PP, lo que no resulta habitual, salvo que sea un tema pacífico que suscita un consenso general.

Según apuntó en el debate el parlamentario de EH Bildu Julen Arzuaga, «estaba contrastado y estaba comentado entre nosotros para no dar más pábulo, para no darle más aire [al PP], para que no siga trayendo este tipo de iniciativas» al Pleno, porque no participa en la Ponencia. Arzuaga se preguntó «cómo nos vamos a fiar señor Pastor en la Ponencia» si se alcanzan posturas comunes y «ustedes rompen su palabra». I.I.