Las autoridades del estado mexicano de Jalisco atribuyeron la muerte de los tres estudiantes de cine desaparecidos el 19 de marzo a miembros de un cartel de las drogas al confundirlos con miembros de grupo rival.

Javier Salomón, Marco Francisco Avalos y Jesús Daniel Díaz fueron detenidos en un camino del municipio de Tonalá, Jalisco, por hombres armados que se identificaron como presuntos miembros de la Fiscalía.

«Los estudiantes fueron privados de su libertad con la finalidad de dañarlos. Luego sus cuerpos fueron disueltos en ácido para que no quedara rastro de ellos», afirmó la Fiscalía en un comunicado que atribuyó este triple homicidio a integrantes del Cartel Jalisco Nueva Generación (CJNG).

La jefa de la investigación, Lizette Torres, informó de que la detención de dos personas así como el hallazgo de «manchas de sangre y muestras biológicas» en dos casas registradas han permitido obtener muestras genéticas de Avalos y Díaz.

Karina Hernández, del Instituto Jalisciense de Ciencias Forenses, dijo que no se cuenta con muestras de ADN de Salomón y se ignora si podrán obtenerlas entre los 33 indicios que faltan por analizar.

Según Torres, los estudiantes, que hacían un trabajo escolar en una finca de Tonalá sin saber que era utilizado por el Cartel Nueva Plaza, una escisión del CJNG, se detuvieron por una avería y entonces fueron interceptados por miembros del CJNG que los trasladaron a una segunda casa a unos seis kilómetros. En esta segunda casa, las autoridades hallaron matriculas y uniformes con logotipos de la Fiscalía y armas de uso del Ejército.