Arnaitz GORRITI
BALONCESTO - SASKI BASKONIA

Derrota e impotencia por no conseguir casi ni competir

A partir del segundo cuarto Fenerbahçe fue muy superior y dominó a un Baskonia que no supo frenar ni aMelli ni a Guduric. Solo en el tercer cuarto reaccionaron los gasteiztarras, pero se quedaron a medias.

KIROLBET BASKONIA 83

FENERBAHçE 92

 

Se acabó lo que se daba. Kirolbet Baskonia cayó definitivamente en el cruce que lo enfrentaba a Fenerbahçe. Los de Pedro Martínez se vieron desactivados por la intensidad otomana, que además ofrecieron un muestrario de sus recursos, ya que fueron tres jugadores reservas como Kalinic, Melli y Guduric quienes tumbaron a los gasteiztarras, sobre todo tras el segundo cuarto.

«Hemos perdido el ritmo defensivo a partir del segundo cuarto», confesaría Pedro Martínez. Después de un primer cuarto igualado, con Huertas y Garino llevando el peso de los gasteiztarras, se vieron avasallados por una capacidad ingente de anotación de los de Obradovic. Melli y Guduric hicieron del triple esquinado todo un arte, sobre todo en el filo del final de posesión. Esas canastas golpearon duramente en la moral de los de Pedro Martínez, y más cuando a la defensa sin éxito se le juntó una mala entrada de Luca Vildoza.

El base argentino recibió una de esas lecciones que otros bases jóvenes al recibido de la mano de los equipos entrenados por Zeljko Obradovic. Tales como los Víctor Sada, Ricky Rubio u Ohayon, Luca Vildoza se vio presionado y superado por las circunstancias, y como su compañero de baile en el juego exterior, Rodrigue Beaubois, no halló ni un poco de paz durante sus minutos en la cancha, al Baskonia le cayó un parcial de 13-23 con el que Fenerbahçe casi sentenciaba el partido, al llegarse al receso con 32-48.

Faltó un rato más de acierto

«Nunca hay que faltarle al respeto ni al juego ni al rival. A estos niveles, en 20 minutos puede pasar cualquier cosa, con lo que el partido no está ganado, declaraba Obradovic durante el descanso. Y eso, en el basket europeo, es Palabra de Dios.

Porque el zorro de Cacak sabe mucho, tanto por viejo como por diablo, y volvió a ponerse rojo y airado cuando Kirolbet Baskonia dio el aspecto de volver al partido. De hecho, los de Pedro Martínez lograron un parcial de 30-14 en el tercer asalto, con un Poirier dominante en la pintura, amén de un Granger incisivo en el tiro, aunque en una jugada aislada volvió a resentirse de su tobillo izquierdo.

Los gasteiztarras se arrimaron hasta siete puntos diferencia, 62-69, y el Buesa Arena quería creer en que la remontada era posible. Pero no fue así. Obradovic dio entrada a Ali Muhammed y el pequeño base castigó la defensa zonal 1-3-1 que planteó el Baskonia. Y solo faltó que Vesely, desactivado durante los 30 primeros minutos, comenzara a tocar todos los rebotes y a encontrar la continuación con Sloukas. Los gasteiztarras corrían con cada vez menos cabeza, al punto de que el banquillo se ganaba una técnica por pura impotencia. El marcador volvía a estirarse y, por desgracia, ya no había opción de victoria.

Los gasteiztarras pudieron maquillar el resultado, pero cuando tantos jugadores como Timma, Shengelia, Beaubois, Vildoza, el propio Janning... terminan desactivados, es casi imposible levantar un partido, mucho menos una eliminatoria.

Bilbao Basket, en descenso

Pero el baloncesto sigue, y el baloncesto vasco no solo se limita a lo que haga Kirolbet Baskonia, por mucho que sea la mayor referencia de la historia del baloncesto de Euskal Herria.

RETAbet Bilbao Basket, que en su día jugó también el cruce de cuartos de la Euroliga, pero a día de hoy ocupa plaza de descenso de la clasificación de la Liga ACB. A cuenta de la Final Four de la Fiba Champions League, UCAM Murcia adelantó la jornada 31 frente al Joventut, y la escuadra verdinegra, entrenada por Carles Durán, ganó por 75-92. Y Bilbao Basket lo paga cayendo a la penúltima plaza.