El presidente estadounidense, Donald Trump, consideró un «gesto positivo de buena voluntad» la liberación por Corea del Norte de los tres estadounidenses que permanecían presos, semanas antes de su histórica reunión con el líder norcoreano, Kim Jong-un.

Se trata de Kim Dong-chul, de 64 años; Kim Sang-duk, de 58, y Kim Hak-song, que ronda los 60, todos nacidos en Corea del Sur y que posteriormente adquirieron la nacionalidad estadounidense. Estaban acusados de espionaje y actos hostiles contra Corea del Norte.

A través de su cuenta de Twitter, Trump anunció que los tres estadounidenses viajaron de regreso a EEUU en el avión del secretario de Estado, Mike Pompeo, tras su visita no anunciada a Pyongyang. Según precisó, «parecen estar en buenas condiciones y fueron capaces de subir al avión sin ayuda».

Pompeo, quien asumió la semana pasada su cargo de secretario de Estado, mantuvo un «buen encuentro» con el líder norcoreano, Kim Jong-un, con quien ya se vio en abril cuando aún era director de la CIA.

En dicha reunión, tal y como se esperaba, «se ha fijado la fecha y lugar» para la esperada cumbre entre Trump y Kim, según señaló el presidente estadounidense en Twitter. En un mensaje en la misma red social, Pompeo ratificó que ha mantenido «encuentros productivos en Pyongyang con Kim Jong-un y ha hecho «progresos».

Los Juegos Olímpicos de Invierno celebrados en febrero en Corea del Sur aliviaron las tensiones en la península. Hasta esa fecha, Kim y Trump intercambiaban insultos personales y amenazas apocalípticas.

«Pensamos que estamos construyendo un vínculo con Corea del Norte», dijo Trump en un mensaje televisado el martes. «Vamos a ver cómo resulta. Quizás no resulta. Pero, podría ser una gran cosa para Corea del Norte, Corea del Sur y para todo el mundo», añadió.

Paralelamente en Tokio se realizó una cumbre tripartita entre los primeros ministros japoneses y chinos, Shinzo Abe y Li Keqiang, así como el surcoreano Moon. «Hemos acordado, en primer lugar, que reconocemos que la desnuclearización completa de la península de Corea, el establecimiento de una paz duradera y el desarrollo de las relaciones intercoreanas son cruciales», dijo Moon.