Cuando a falta de 13 segundos, Bojan Dubljevic anotó la canasta que adelantaba a Valencia Basket 80-75 en su desempate ante Herbalife Gran Canaria, nadie hubiera imaginado que el partido se lo llevarían los «pío, pío» por 89-92 en la prórroga. Es, sin duda, el bombazo de los cuartos de final, un bombazo que, amén de clasificar a los grancanarios a las semifinales de la Liga ACB, les otorga una plaza en la Euroliga de la próxima campaña.

Los de Luis Casimiro, sin tiempo ni para respirar, arrancan su serie esta misma tarde en la cancha del Real Madrid a partir de las 18.30. Pero lo cierto es que, aunque cayeran por un fulminante 3-0, su temporada, que ni de lejos ha estado a la altura de lo esperado, y con un Luis Casimiro muy cuestionado, habrá acabado con broche de oro.

De paso, supone un durísimo mazazo para el aún vigente campeón de la ACB. Valencia Basket, un club que desde hace tiempo, y de la mano de su mecenas Francisco Roig, siempre ha querido ubicarse a la altura del Baskonia, se ha quedado compuesto y sin Euroliga, cerrando una campaña decepcionante para los taronja, eliminados en cuartos de final tanto en Copa como en la Liga, y asolados por las lesiones.

Kilómetros a tutiplén

El reglamento de la Euroliga especifica que los equipos deben tener conexión con el aeropuerto de Frankfurt en cuatro horas. Podría existir la duda de si Gran Canaria pudiera tener problemas de conexión aérea.

Por lo pronto, la web de la Euroliga da la bienvenida a Gran Canaria para su próxima edición. Ahora habrá que ver si sorprende al Real Madrid.