Joseba ITURRIA
CAMBIOS EN LA REAL SOCIEDAD

Para ser un club de cantera toca valorar más lo que hay en Zubieta

La llegada de Roberto Olabe ha supuesto cambios importantes en la estructura de la Real y se han sustituido a casi todas las personas que trabajaban en la dirección deportiva y a todas las que estaban en el primer equipo. De los que trabajaban en Zubieta solo se ha recurrido a Jon Ansotegi para ayudar a Asier Garitano y con un papel más que secundario.

Aperribay ha defendido desde su llegada que la Real es un club de cantera que debe mirar primero a Zubieta, pero su decisión de sustituir a Loren por Olabe ha venido acompañada de una revolución de la que apenas se ha salvado Erik Bretos y en la que Jon Ansotegi ha sido el único que trabajaba en la Real que valía para acompañar a Asier Garitano en el primer equipo y con un puesto muy secundario. Y la primera apuesta en materia de fichajes que se pretende, que romperá todos los parámetros que tenía el club, se busca en las posiciones en las que hay más jugadores de Zubieta en el primer equipo y más jóvenes de proyección en la cantera.

No es bueno el mensaje que se lanza a Zubieta con el staff del primer equipo. Parece que los sustituidos han sido responsables de la mala temporada cuando ha bastado con cambiar una pieza, la de Imanol por Eusebio, para que con el mismo equipo de trabajo, los mismos jugadores y un entrenador que corrigió unas pocas cosas sumar 16 puntos de los últimos 27 –media mejor que la del quinto– en la fase de calendario más difícil contra tres de los cuatro equipos de más presupuesto. No vale ni el analista, que se va al Atlético, ni los preparadores físicos, ni el entrenador de porteros, ni el readaptador... Nadie, del equipo que clasificó a la Real para la Europa League el año pasado. Pero es que tampoco vale ninguno de los que trabaja en el club tras una temporada en la que el Sanse ha entrado en play-offs de ascenso a Segunda por cuarta vez en su historia, en la que la Real C ha completado la mejor temporada desde su creación, el juvenil ha competido hasta el final con el Athletic y el Easo y el cadete han ganado en sus categorías a los rojiblancos.

Valverde es el mejor entrenador de la Liga y al fichar por el Barcelona la pasada campaña solamente fue acompañado de Jon Aspiazu, su ayudante de confianza, y de un preparador físico, José Antonio Pozanco, que además había trabajado en el Barcelona. El resto de componentes del staff eran personas que estaban en el primer equipo azulgrana. Es importante dar continuidad al trabajo y tener personas que conozcan el club y por eso en la Real lo normal era que el entrenador llegara siempre con una persona de confianza y que se completara el equipo con otras personas de Zubieta.

Asier Garitano sí llega acompañado solo de su preparador físico Miguel Ángel Pérez, pero el resto son personas fichadas por Olabe, entre las que destaca Rubén de la Barrera. No es normal que un primer entrenador de Segunda se comprometa con un Primera como segundo y menos cuando sus formas de ver el fútbol son completamente diferentes. Lo normal es que un entrenador y su ayudante compartan el mismo estilo de juego, aunque Garitano defiende este fichaje y esta fórmula para mejorar en ataque. Ojalá lo consigan y no haya problemas.

Imanol renovó ayer hasta 2021 como entrenador del Sanse y junto a él, como ya adelantó GARA, estará Mikel Labaka como ayudante mientras que Aitor Zulaika pasa a ser coordinador entre Sanse, Real C y juvenil y ayudante de Sergio Francisco en el segundo filial. Jon Alemán pasa del primer equipo a encargarse de los porteros de los dos filiales, que tendrán como preparadores físicos a Oier Agirrezabalaga y Etor Reguera. Jon Mikel Arrieta seguirá con el primer juvenil con Mikel Llorente, hermano de Joseba, de segundo.

La Real ha fichado de todo menos jugadores y sorprende que la primera operación que se pretende cerrar sea la de Mikel Merino. Especialmente por su precio porque los quince millones que se presentan como traspaso a pagar al Newcastle solo son superados por los 17 pagados por Illarra, con la diferencia de que se habían cobrado 32 dos años antes por su marcha. Y es una cantidad muy alta por un medio centro que costó siete hace unos meses y que apenas ha jugado en las dos últimas temporadas. En el Borussia de Dortmund jugó 293 minutos en ocho partidos, dos de titular, y este año en el Newcastle ha llegado a los 1.343 en 24 partidos, 14 de titular, y solo ha jugado 23 en las últimas nueve jornadas de Liga en las que ha estado disponible. Un Newcastle de la zona media de la Premier. No son números que justifiquen semejante traspaso y menos competir con el Athletic a la hora de pagarle la ficha porque el club rojiblanco puede ofrecer tres o cuatro millones anuales y competir con esa oferta le convertiría en el mejor pagado de la plantilla, cuando jugadores como Illarramendi, Oyarzabal o Willian José merecerían cobrar el doble que él. Y menos comprensible es esta apuesta porque en la posición de medio centro la Real tenía con contrato a cinco canteranos como Illarra, Zubeldia, Pardo, Zurutuza y Markel –a la espera de que se confirme oficialmente su fichaje por el Getafe–, Guevara ha sido convocado para hacer la pretemporada y es la que ofrece más jugadores de nivel e internacionales en la cantera.

Se esperan fichajes y salidas de canteranos. De los 16 que pasaron por la cantera en la plantilla de la clasificación para la Champions de la 2012-13, se pasó a los 22 que formaron parte del primer equipo o jugaron en la 2016-17 del sexto puesto y la temporada pasada la cifra volvió a ser de dieciséis. Es muy fácil hablar de ser un club de cantera, pero para serlo hay que mirar antes a Zubieta e intentar formar la plantilla con la mayor cantidad de canteranos. Porque igual ése es el mayor cambio.