¿Cómo está pasando las fiestas?

Como todos los años: es decir, con la misma emoción del primer día en el que me metieron en la cartera que se ha convertido en mi hogar y mientras depositaban en mí tantísimas ilusiones.

Usted siempre está disponible, pero parece que en sanfermines se multiplican las posibilidades de que llegue su oportunidad. ¿Es así o se trata de una falsa percepción?

Desde luego las fiestas son un momento especialmente propicio, aunque también es verdad que con el “Pobre de mí” suele llegar la amarga decepción de otros sanfermines en blanco. Pero nunca me vengo abajo y de nuevo estoy en plena forma, porque, en el fondo, no dejo de ser un verdadero canto a la esperanza en versión látex.

¿Este año se muestra más optimista?

Es una mezcla de optimismo y de presión, ya que en la parte de atrás tengo una espada de Damocles que me atosiga un poco y me hace sentir ansiedad.

¿A qué se refiere? ¿Cuál es esa amenaza que tanto le inquieta?

Se trata de la fecha de caducidad, que marca con claridad agosto de 2019 . El final se acerca de forma inexorable y no me gustaría quedar inservible sin haber llegado a debutar en la feria.

¿Está dispuesto a todo con tal de romper ese maleficio?

¿A todo? No, eso jamás. Lo que únicamente espero es que aquel que recurra a mis servicios no sea una mala bestia y entienda que «no, es no». Antes que un mal uso, prefiero que me tiren a la basura con el precinto intacto.