La detención en Sevilla de Ángel Boza, el componente más joven de «La Manada», vuelve a elevar la polémica sobre la excarcelación de los cinco condenados por la violación de una joven en sanfermines, reducida por el tribunal a «abusos». A la excepcionalidad que supuso que fueran liberados pese a tener un castigo de nueve años de cárcel, justificada en que han recurrido al Tribunal Supremo, le han sucedido dos anomalías: primero, el intento de uno de los miembros (el guardia civil Antonio Manuel Guerrero) de recuperar su pasaporte pese a tener prohibida la salida de territorio estatal, y ahora este arresto de Boza, acusado de robar unas gafas en un centro comercial de Sevilla y atropellar después a dos vigilantes jurados al intentar huir. Anoche el Juzgado de Guardia de la capital andaluza dictó contra él auto de prisión provisional sin fianza.

Su propio abogado, Agustín Martínez, intentó marcar distancias respecto a la actitud del joven, indicando en Tele5 que «se me van a tener que dar explicaciones, porque yo no voy a ir poniendo la cara públicamente para que me la partan. Y aunque yo no soy responsable de lo que este señor haga, hay muchas personas afectadas», añadió sobre el resto del grupo.

«Comportamiento ejemplar»

El letrado lamentó que los cinco miembros de «La Manada», de los que apuntó que «no son ejemplo de absolutamente nada», se vayan a ver envueltos «en un titular por este asunto con el que no tienen nada que ver», cuando «están intentando tener un comportamiento ejemplar y esto supone una quiebra más de su anonimato».

Martínez intentó, en cualquier caso, desligar lo sucedido en Sevilla del proceso judicial de Iruñea, indicando que «la naturaleza del delito es distinta». Sin embargo, se ha confirmado que los hechos del centro comercial del barrio de Nervión fueron trasladados inmediatamente a la Audiencia de Nafarroa por si creyera procedente evaluar de nuevo la situación de libertad provisional del grupo.

Cabe recordar que por el asunto del pasaporte ya se valoró de nuevo la excarcelación del guardia civil Guerrero, si bien el tribunal determinó, casi un mes después de trascender el hecho, que podía continuar en libertad provisional.

De paso, el abogado de Ángel Boza reveló que su cliente tiene también otro juicio pendiente en Donostia, y de nuevo por el presunto hurto de varias gafas de sol. En el perfil de este joven se acumulan los antecedentes, que apuntan a varios robos con violencia y delitos de tráfico que se suman a la agresión sexual múltiple de la madrugada del 7 de julio de 2016. Nada de ello fue tenido en cuenta en la decisión de excarcelarle.

Boza no está implicado, por contra, en la denuncia por agresión a otra joven en Pozoblanco (Córdoba), por el que otros miembros de «La Manada» siguen pendientes de juicio. Un retraso que ha resultado determinante también para su excarcelación en Iruñea. La causa ha sido declarada «compleja», lo que pospone la vista oral sin fecha, si bien el vídeo de abusos a la joven en un coche, grabado y difundido por los propios autores, ya es muy revelador.

En un primer momento se informó de que Boza condujo en su intento de huida de El Corte Inglés un vehículo sin estar facultado para ello, dado que se le había retirado el carnet por delitos de tráfico. Luego se rectificó la información, matizando que había recuperado el documento esta misma semana después de ocho meses de sanción.

Según el atestado de la Policía Local de Sevilla, Angel Boza acudió la tarde del miércoles a un centro comercial de la capital andaluza y, tras interesarse por unas gafas de sol valoradas en unos 200 euros, se hizo con las mismas retirándoles el dispositivo de alarma y colocando otras que portaba anteriormente en el lugar del expositor de venta.

Tras ello, se habría desplazado al aparcamiento del centro comercial para subir a su vehículo y abandonar el recinto, siendo abordado por dos vigilantes de seguridad al haberse percatado del hurto uno de los vendedores del centro comercial y dar la alerta. Lejos de atender las indicaciones de los vigilantes, siempre según la Policía Local de Sevilla, Boza embistió contra ellos con su coche, resultando ambos lesionados aunque no de gravedad. Uno tenía el golpe en el costado y otro en una mano.

Después de que los vigilantes avisasen a las comisarías, agentes del Grupo Giralda de la Policía Local interceptaron a Angel Boza en la avenida Menéndez Pelayo cuando conducía su propio vehículo.

Trasladado a comisaría, donde pasó la noche, el miembro de «La Manada» se acogió a su derecho a no declarar ante la Policía Local. Luego fue llevado ante el Juzgado de Sevilla, donde entrada la noche se dictó prisión. Hoy mismo debía ir a firmar en las comparecencias impuestas por la Audiencia de Nafarroa.

 

Detenido en Landas por la denuncia de Baiona

Un hombre de 37 años de la localidad landesa de Dax ha sido detenido en relación con una denuncia de agresión sexual producida durante las fiestas de Baiona. Una mujer de 21 años le acusó de haberla violado en un apartamento de Sent Pau d'Acs durante la noche del 28 de julio.

Ambos se habrían conocido en Baiona esa misma noche. Según la Fiscalía, posteriormente tomaron un tren «sin intimidación», pero la joven asegura no saber cómo había llegado hasta el apartamento de Sent Pau d'Acs. El hombre ha admitido haber mantenido relaciones sexuales, pero afirma haberse detenido ante la negativa de la joven.

Por otro lado, en Bilbo un hombre de 47 años fue detenido la noche del miércoles acusado de agredir a su compañera sentimental en la calle ante varios testigos que le sujetaron y ante la hija de ambos, de 7 años.