Iñaki IRIONDO
GASTEIZ
Ponencia de autogobierno

PNV, EH Bildu y EP piden un texto articulado sobre la base acordada

La Ponencia de Autogobierno refrendó ayer las bases del Nuevo Estatus ya aprobadas y –con el voto de PNV, EH Bildu y Elkarrekin Podemos– acordó encomendar al grupo de expertos la redacción de un texto articulado acorde a esas bases y que cualquier ampliación se haga salvaguardándolas. El PNV dijo sorprenderse de la abstención del PSE.

La Ponencia de Autogobierno acordó ayer que un grupo técnico (la comisión de expertos) redacte «la propuesta inicial» de texto articulado del Nuevo Estatus «en congruencia y de conformidad» con las bases aprobadas los meses pasados y refrendadas ayer. Se «contemplará y procurará» también «hallar puntos de conexión con los votos particulares», pero ello habrá de hacerse «desde el respeto y salvaguarda de las bases consensuadas».

Tras un debate en el que barajaron otras opciones, votaron a favor de esta encomienda a la comisión de expertos PNV, EH Bildu –que introdujo el término de «salvaguarda»– y Elkarrekin Podemos. El PP votó en contra. Y el PSE se abstuvo, según su explicación porque no se asumía su propuesta de que la primera tarea del grupo fuera «identificar el alcance constitucional» de las bases aprobadas por Ponencia de Autogobierno.

Sorpresa del PNV con el PSE

Por la tarde, el PNV hizo pública su «sorpresa» con la abstención del PSE en la votación de la encomienda. Según la comunicación remitida a los medios, los representantes jeltzales en la Ponencia –Joseba Egibar e Iñigo Iturrate– calificaban de «incomprensible» este posicionamiento de sus socios de Gobierno.

El PNV dice no entender que «habiendo estado con ellos trabajando los términos de la resolución y habiendo incorporado parte de sus planteamientos, finalmente los socialistas no se hayan sumado al acuerdo mayoritario».

Los representantes jeltzales reiteraban «la necesidad de que el PSE mueva ficha y se implique. Nosotros ya lo estamos haciendo, porque insistimos en que queremos un acuerdo lo más amplio posible».

Relevo

Según lo acordado ayer en la Ponencia, la comisión de expertos tomará ahora el relevo de los políticos, para tratar de lograr un texto articulado con las bases acordadas, y que ayer se volvieron a votar. Todas ellas se aprobaron con el voto favorable de PNV y EH Bildu, salvo la del capitulo sexto, relativo a derechos de la ciudadanía y de la mujer, a la que se sumó Elkarrekin Podemos.

La Ponencia otorga a los expertos autonomía para determinar su fórmula de trabajo. Según declaraciones posteriores a la reunión, EH Bildu había propuesto que en la comisión se tuviera en cuenta el apoyo parlamentario del grupo que había propuesto a cada persona, para dirimir las diferencias que se pudieran dar. El debate se zanjó cuando un representante del PP hizo ver que los expertos no tenían nada que votar porque su tarea era otra. La coordinadora de la Ponencia, la jeltzale Jone Berriozabal, explicó después ante la prensa que el cometido de la comisión era el de expertos, no el de políticos.

A los comisionados se les exige «un compromiso de confidencialidad sobre sus labores y sus deliberaciones mientras duren sus trabajos». Ese plazo es de ocho meses, lo que supone que no tendrán que entregar el texto articulado hasta después de las elecciones forales, municipales y europeas de mayo de 2019.

EH Bildu y PP pidieron que ese plazo fuera de seis meses. El grupo de la izquierda independentista, porque quiere acelerar los trabajos y entiende que medio año era un tiempo suficiente. El PP, según explicó Antón Damborenea, porque cree que PNV y PSE están jugando con el calendario por intereses electorales, y no quieren que el texto llegue en vísperas de los comicios. Según Damborenea, a los jeltzales les interesa estar hablando de estas cosas ahora, para ocultar otras, pero no cuando lleguen las elecciones.

Borrador

Lo que la comisión de expertos deberá devolver a la Ponencia es un borrador de un proyecto de ley elaborado con las bases ya aprobadas mayoritariamente. Y también podrá identificar aquellos puntos en los que entiende que podría haber acuerdos sobre aspectos recogidos en los votos particulares o en las aportaciones sociales que ha recogido Eusko Ikaskuntza y que entregará este mes.

Los partidos o el partido que se identifique con ese texto lo tendrá que presentar como proposición de ley, para ser debatido en el Parlamento.

Ensanchar acuerdos

Salvo el PP, que dice que las bases son un delirio independentista, todo el resto de grupos ve posibilidades de ensanchar la base de los acuerdos en el ámbito de los derechos sociales, la igualdad y la adaptación de las competencias fijadas en 1979 a los tiempos actuales. Así lo manifestaron ayer. La portavoz de EH Bildu, Maddalen Iriarte, recordó que durante los debates de la Ponencia estuvieron abiertos a incorporar estos puntos a las bases, a lo que se negaron sus proponentes.

El problema estará en el núcleo central del Nuevo Estatus, que la encomienda dice que debe respetarse, y que es el reconocimiento del derecho a decidir y el blindaje de los derechos sociales, económicos y culturales, que algunos de los grupos consideran inconstitucionales.

Los partidos son conscientes de la difícil tarea que tienen los expertos. Jone Berriozabal explicó que la Ponencia ha querido dejar «una puerta abierta» a que «otras personas con otros ojos» puedan nuevos puntos de encuentro.

Maddalen Iriarte, de EH Bildu, consideró muy importante que se haya reafirmado el acuerdo alcanzado con el PNV y que haya quedado claro que es la base para redactar el texto, porque expresa el sentir de la mayoría social. Insistió en que esto es una cuestión de democracia, de que todos los proyectos políticos puedan ser defendibles y materializables.

 

Malestar con Podemos por utilizar la paridad a última hora

Después de que se conociera la identidad de los cinco expertos nombrados por los partidos, y con ello que cuatro de ellos son hombres y solo una es mujer, Elkarrekin Podemos registró un propuesta para duplicar la composición de la comisión y que cada grupo nombrara un hombre y una mujer. El punto se trató en la reunión de ayer de la Ponencia, y Elkarrekin Podemos solo encontró el apoyo de EH Bildu, que la única condición que puso es que eso no retrasara el inicio de los trabajos y que los nuevos y las nuevas elegidas se incorporaran a la comisión cuando fueran designadas.

La propuesta de Elkarrekin Podemos no fue aprobada. La coordinadora de la Ponencia, la jeltzale Jone Berriozabal, informó diplomáticamente a la prensa de que la decisión de que la comisión estuviera compuesta por cinco personas fue adoptada en su día por unanimidad de los partidos y que la mayoría no había visto razonable que cuando se conocieron los nombres se intentaran cambiar las reglas de juego.

Por lo escuchado a los grupos en la sala de prensa, y por lo conocido de lo ocurrido dentro de la reunión de ayer, PNV, PSE y PP no solo mostraron su discrepancia con la propuesta de Elkarrekin Podemos, sino que le afearon duramente el haber aceptado primero que el grupo estuviera compuesto por cinco personas y después tratar de sacar rédito al resultado apareciendo en público como únicos defensores de la paridad.

Las bases del Nuevo Estatus tienen un componente trasversal de defensa de la igualdad entre hombres y mujeres, y cuentan con un capítulo sobre derechos de la ciudadanía y derechos de las mujeres con el apoyo de Elkarrekin Podemos, que fue además a quien se encargó su redacción. Pese a ello, el portavoz del grupo, Lander Martínez, sostuvo ayer que la composición de la comisión de expertos hace que la redacción del texto articulado se haga ignorando a la mitad de la ciudadanía, lo que dará lugar a un «Estatuto escrito por hombres». Elkarrekin Podemos sostiene que la composición de la comisión de expertos es contraria a la Ley de Igualdad y se preguntó si se puede dejar a la mujer fuera de la política. Martínez calificó de «anacronismo» esta comisión creada en el año del «#MeToo» y de «la huelga feminista del 8 de Marzo».

José Antonio Pastor, del PSE, recordó a Lander Martínez que la posibilidad de que la comisión estuviera compuesta por dos personas por partido ya se propuso –y no lo hizo Elkarrekin Podemos– y se desestimó. Le reprochó que EP pida paridad en la comisión pero su representación en la Ponencia esté formada por dos hombres y una mujer. Dijo que eso también puede ser anacrónico.

Antón Damborenea, del PP, apuntó que hubo un momento en que la comisión era de diez, pero luego se desechó. Dijo no entender el debate, porque ellos no eligen mirando si es hombre o mujer, sino por su valía.I.I.