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La Real sigue sin ganar en los cuatro partidos jugados en Anoeta, en los que solo ha logrado dos empates. El de ayer ante un Girona que fue más fiel al estilo de Pablo Machín que al que defendió Eusebio en su etapa blanquiazul. El técnico vallisoletano anunciaba que en Anoeta se iba a decantar entre las dos formas de jugar que ha alternado en este inicio de temporada, la que le caracterizó en la Real y la que tenía el Girona con Machín, y decidió alinear los tres centrales utilizados por su predecesor y no asumió los riesgos que caracterizaba a la Real en su etapa.

El Girona fue mucho más práctico que la Real de Eusebio, y volvió a tener menos posesión de balón que un rival (53% por 47%) y eso que Asier Garitano no la busca. Tampoco asumió los riesgos ni abrió los espacios que caracterizaba a la propuesta de Eusebio en la Real para defender un empate que incluso pudo convertirse en victoria en las dos últimas ocasiones del partido de Stuani y Lozano.

Habría sido exageradamente injusto porque ya el empate fue demasiado premio al partido del Girona porque Bono fue su jugador más destacado con la ayuda de los postes. Hasta ocho paradas realizó el buen portero marroquí por solo una de Moyá en un dato que refleja que la Real tuvo más remates, pero tampoco mucho más juego. La Real de Garitano compite, pero le cuesta dominar e imponerse en los partidos de Anoeta y esa es su asignatura pendiente.

Solo un cambio con el derbi

El de Bergara presentó casi el mismo once que ganó el derbi de San Mamés con la única variación de la entrada de Sandro en detrimento de Luca Sangalli. El canario comenzó como segundo delantero junto a Jon Bautista de un 4-4-2 que dejaba a Pardo en la banda derecha el día que cumplía 26 años. Mediado el primer tiempo Garitano cambió de sistema y pasó a un 4-2-3-1 con Oyarzabal en la derecha, el riojano en la media punta y Sandro en la izquierda.

Eusebio, por contra, introdujo tres cambios con respecto al equipo que perdió contra el Eibar con la entrada de Ramalho, Pere Pons y Doumbia en sustitución de Muniesa, el lesionado Álex Granell y el máximo goleador de Primera, Stuani, autor de ocho de los diez goles de su equipo, que se quedó en el banquillo tras los viajes realizados con la selección de Uruguay.

Con estos planteamientos el fútbol fue pobre. En el primer tiempo la Real tuvo más control del partido y generó más peligro en los remates de Bautista, Oyarzabal, Pardo y Sandro que encontraron en todos los casos una buena respuesta de Bono, en el caso del canario con la ayuda además del poste.

El Girona apenas creó peligro y los mayores problemas para la Real llegaron con la sensación de inseguridad que trasmitió Miguel Ángel Moyá en algunas acciones en las que de ser Rulli el protagonista el runrún en la grada se habría reproducido.

Sandro, muy presente

El segundo tiempo comenzó con otro disparo de Sandro y Garitano dio entrada a Juanmi tras cumplir sus tres partidos de sanción en la izquierda de un 4-3-3 con Illarramendi más retrasado que Zubeldia y Pardo. El malagueño, en posible fuera de juego, dejó una buena opción a Sandro, que volvió a encontrarse con Bono y con el poste sin que Oyarzabal pudiera con el portero en el segundo remate.

Tras esa jugada Willian José entró en el lugar del canario y más agradeció la Real la entrada de Luca Sangalli, que tuvo un buen remate. Eusebio recurrió a Stuani en sustitución de un Portu que no pudo con Kevin y el de Baiona desbarató la opción más clara del uruguayo en unos últimos minutos en los que la Real sufrió. A esa jugada le siguieron dos saques de esquina y en el segundo Lozano remató el balón con la espalda y casi entra. Fueron los únicos minutos en los que un Girona muy conservador inquietó a una Real que no termina de aprovechar el buen ambiente que tiene el nuevo campo de Anoeta.

«Necesitamos más pausa y generar más»

El técnico de la Real, Asier Garitano, fue claro en sala de prensa al señalar que «nos ha costado. Lo hemos intentado. No es fácil con una defensa de cinco y fuera de casa lo están haciendo francamente bien y además con gol. Ha sido un partido muy igualado, peligroso y al final podía ir hacia un lado o al otro. Necesitamos un poco más de pausa, jugar más y más continuidad en ataque.

Para el mutrikuarra Asier Illarramendi, «sumar no es tan malo. Nos está costando ganar el primer partido en casa. El empate ha sido lo más justo». Asimismo, el capitán txuriurdin añadió que «nos ha costado llegar en los últimos metros con claridad. Hemos tenido algunas ocasiones para marcar, pero ha sido un partido bastante igualado».

En el bando contrario, el de ayer fue un partido «muy especial» para Eusebio Sacristán. «Me he sentido muy bien, muy a gusto, por todo el recibimiento. Y por ver los cambios muy positivos del campo, con la gente muy cerca, la grada de animación, que va a ser muy positivo para el club. Esta es mi casa. Han sido dos años y medio maravillosos. He estado encantado en este club. Cuando ves la alineación ya dices, ‘¡guau¡ Este equipo ya ha ganado con tantos jugadores de la casa’. Os tiene que hacer sentir orgullosos y especiales. Siempre le estaré muy agradecido a la Real», explicó.

Sobre el resultado, señaló que «el partido podía haber caído para cualquiera de los dos, pero el empate es un resultado justo». Y añadió lo siguiente: «Hemos tenido que tener mucha intensidad ante un equipo muy compacto. En el aspecto defensivo hemos tenido que trabajar mucho. Muy contento con el trabajo de los jugadores, con el partido tan compacto que hemos sacado un empate».GARA

Protagonistas

Moyá. Se mostró inseguro en el primer tiempo en dos salidas por arriba y en un balón que le dejó Raúl Navas dentro del área y se lió. En la segunda mitad estuvo mejor.

Raúl Navas. Tanto él como Aritz se mostraron seguros en tareas defensivas y el sevillano estuvo acertado además a la hora de combinar con sus delanteros.

Kevin. Logró que Portu pasara desapercibido, supo jugar con una tarjeta y desbarató una clara opción de Stuani.

Illarra. Volvió a jugar más retrasado y así se siente más cómodo, aunque en ataque tampoco tuvo protagonismo porque enlazaban más los centrales que él con los jugadores más adelantados.

Pardo. Comenzó en la banda derecha, pasó a la media punta y luego acabó más escorado a la izquierda. Trabajó más sin balón que con él.

Sandro. Jugó su primer partido como titular. Empezó de segunda punta y después jugó en la banda izquierda. Envió dos balones al poste.

Descanso hoy y tres sesiones a puerta cerrada

La primera plantilla realista tendrá hoy jornada de descanso y desde mañana hasta el viernes se entrenará a puerta cerrada a las 10.30 en Zubieta para visitar el sábado al Atlético de Madrid a las 20.45. Un partido en el que ya podrá jugar Theo Hernández tras cumplir su sanción.

El Atlético viaja a Dortmund para visitar al Borussia

El Atlético de Madrid viaja hoy a Dortmund para jugar mañana el partido de Liga de Campeones contra el Borussia. José María Giménez no se ejercitó con el grupo ayer e hizo entrenamiento alternativo por unas molestias derivadas de una elongación del nervio ciático del muslo.