A partir de las 19.30, Kirolbet Baskonia y Valencia Basket cerrarán la séptima jornada de la Liga ACB en el Buesa Arena. Da igual que el cuadro gasteiztarra venga de propinar sendas palizas en sus tres últimos partidos de competición doméstica o que el cuadro taronja dispute este año la Eurocup; el encuentro es digno de Euroliga entre dos equipos cuya rivalidad se ha ido disparando estas últimas temporadas.

En cualquier caso, la situación clasificatoria es bastante mejor para los gasteiztarras, 5-1, que para su rival, 3-3, que además llega a Zurbano con tres ausencias tan importantes como Diot –habrá que ver si el base francés vuelve a vestirse de corto algún día–, Joan Sastre y Rafa Martínez –uno de los «villanos preferidos» de la parroquia baskonista–. Asimismo, los de Pedro Martínez se pudieron quitar la espina de la Euroliga el pasado jueves ante Darussafaka, mientras que el juego taronja, a las órdenes de otro viejo conocido como Jaume Ponsarnau, no termina de carburar por mucho que el talento de sus piezas atesore gran peligro.

Pasos adelante

Tras la victoria del jueves, Pedro Martínez quiere seguir viendo progresar a su equipo.

«Somos un equipo en construcción, con jugadores nuevos en la competición. Todavía tenemos algunos automatismos que no están plenamente fijados. Me gustaría ver que se van cogiendo y mejorando. Sabemos también que por el camino encuentras las dificultades que te pone el rival, las pequeñas lesiones que van retrasando un poco todo, y hemos de intentar que se vean siempre pasos adelante», manifestó.