Trabajadoras y trabajadores de Gestamp Tool Hardening (GTH) empezaron ayer una serie de movilizaciones, con paros de dos horas por cada turno, por la renovación del convenio que caducó el pasado 31 de diciembre. Según relató LAB, el primer paro –de 12.00 a 14.00– tuvo un «seguimiento total».

El sindicato informó que lo que la dirección ofrece a la plantilla «perpetua unas condiciones laborales que no dan respuesta a las reivindicaciones de la plantilla». Ya a mediados de setiembre el comité entregó una plataforma de convenio y a finales de noviembre, «ante la falta de una respuesta real», la asamblea decidió parar las horas extra en planta y puesta a punto en el exterior, hasta recibir una propuesta seria por parte de la empresa.

«Como los trabajadores y las trabajadoras siguen sin recibir una propuesta con verdadero contenido, han aprobado, casi con total unanimidad, dar inicio a un calendario de paros y movilizaciones», explicó la central mediante un comunicado.

Indicó que GTH se creó en 2011 y que a día de hoy, cuentan con un pacto y condiciones muy por debajo de las plantas de Gestamp en Bizkaia. Además, añaden que se trata de la única planta de estampación en caliente de Euskal Herria, ya que el resto son estampaciones en frío. «Gestamp está haciendo una apuesta a nivel mundial por la estampación en caliente, pero ésta no se ve reflejada en las condiciones de trabajo de la planta», argumenta LAB.

Las movilizaciones y los paros de dos horas en cada turno se alargarán hasta el jueves de esta semana. Hoy, además del paro laboral, realizarán una caravana de coches hasta Matricería Deusto, situada en el Polígono Torrelarragoiti de Zamudio. Para mañana han anunciado una kalejira dentro del Parque Tecnológico y el jueves, 10 de enero, último día de la huelga, harán un hamaiketako ante las oficinas de la empresa.

Concentración de Tecuni

Por otro lado, la plantilla de Tecuni se concentró el pasado sábado en la plaza de Arriaga, en Bilbo, para protestar por el inminente despido de más de 40 compañeros y compañeras.

La dirección decidió rescindir el contrato de mantenimiento que tenia con Iberdrola y, debido a ello, empleados y empleadas de la sección de Omexon perderán sus puestos de trabajo.

El 15 de enero se cumple el plazo y se quejan de que desde hace dos meses la dirección ha rechazado reunirse con los representantes de la plantilla para intentar dar una solución.