El Gobierno español remitió ayer a Lakua un cronograma que prevé la transferencia en doce meses de 33 de las 37 competencias que faltan para cumplir el Estatuto de Autonomía aprobado en 1979, hace cuarenta años. El calendario no contempla las cuatro transferencias relativas a la gestión de la Seguridad Social y deja para el último plazo el «sistema penitenciario». Ambas materias figuran como «prioritarias» en el pacto firmado por PNV y PSE para gobernar en la CAV.

Las últimas transferencias, relativas a dos tramos de ferrocarril y seis kilómetros de la AP1, reconocidas por el Tribunal Constitucional, tardaron meses en acordarse y materializarse finalmente el pasado diciembre.

Por otra parte, en octubre de 2010 el Gobierno de José Luis Rodríguez Zapatero propuso un calendario de apenas 20 competencias, muchas de ellas consideradas menores, para traspasar en 14 meses, a cambio del apoyo del PNV a sus presupuestos, y casi la mitad fueron incumplidas, al convocar el PSOE elecciones anticipadas para el 20 de noviembre de 2011.

Ahora, sobre el mandato de Pedro Sánchez pende la duda de que pueda llegar a completar la legislatura que teóricamente concluye en junio de 2020.

Con estos antecedentes, los periodistas se mostraron escépticos sobre el cumplimiento del cronograma en la rueda de prensa que Josu Erkoreka ofreció tras el Consejo de Gobierno y en la que anunció que acababan de recibir el documento de Madrid. Erkoreka reconoció que en la negociación pueden surgir dificultades porque tanto un ejecutivo como el otro pueden tener diferencias sobre las condiciones en las que se pretenda transferir la competencia. Confió, sin embargo, en que Pedro Sánchez ha mostrado su intención de gobernar hasta junio de 2020, lo que incluso proporciona un «colchón» sobre la previsión de completar las transferencias para enero de 2020.

En tres fases

El cronograma presentado por el Gobierno español prevé iniciar las negociaciones en febrero, con la remisión a Lakua de sus propuestas sobre siete transferencias. Son los de legislación sobre productos farmacéuticos, seguro escolar, ayudas a la jubilación de trabajadores afectados por Expedientes de Regulación de Empleo, transporte ferroviario en línea de cercanías y Feve, escuelas viajeras, centros de estudio y experimentación y obras públicas, y administración institucional e innovación tecnológica. El «horizonte de acuerdo» para estas materias se coloca en marzo.

Otras once competencias se comenzarían a negociar en abril y deberían estar acordadas para el mes de julio.

Por último, el calendario recoge un conjunto de quince transferencias que se abordarían a partir de setiembre, después del verano de 2019, con la intención de tenerlas acordadas para enero de 2020.

El portavoz del Gobierno de Lakua, Josu Erkoreka, recordó que la transferencia de prisiones es considerada «prioritaria» por su Ejecutivo y que el Estatuto lo define como «competencia exclusiva». Según el Tribunal Constitucional, que Madrid siga gestionando materias que no le competen es algo legal pero «anómalo». Y mostró su preocupación porque el Gabinete de Sánchez esté tomando decisiones en infraestructuras penitenciarias sin contar con Lakua.

Aprovechar la oportunidad

Josu Erkoreka también mostró el malestar de su Gobierno por el hecho de que Madrid no haya ni siquiera incluido en el calendario las materias referidas a la gestión de la Seguridad Social, recogida en el Estatuto, pero se consoló con que tampoco aparece una «negativa expresa» a abordarlas en el futuro.

La posición oficial de Lakua es la de dejar de lado las discusiones sobre «prioridades o aspectos formales», para trabajar ya sobre «materias concretas». Josu Erkoreka explicó que «es la primera vez que el Gobierno Vasco tiene a su disposición un plan de trabajo concreto, con materias y plazos para completar el Estatuto; es una ocasión que hay que aprovechar a pesar de las discrepancias que existen».

El PSE se pone una medalla

Una vez conocido el envío del cronograma de Madrid a Lakua, la secretaria general del PSE, Idoia Mendia, hizo público un comunicado en el que subraya que la presencia de su partido en las instituciones, «a los dos lados de la mesa», está permitiendo desarrollar el autogobierno y completar el Estatuto de 1979.

En opinión de Mendia, el envío de un calendario para completar una Ley Orgánica aprobada hace casi cuarenta años confirma que, como valora el Acuerdo de Gobierno suscrito por su partido con el PNV, el Estatuto «ha supuesto y sigue suponiendo como instrumento de vertebración de la convivencia democrática en Euskadi y como fuente de bienestar para la ciudadanía».

 

EH Bildu critica el modelo de subordinación

Al conocer la remisión del calendario y su contenido, EH Bildu calificó de «tomadura de pelo» que el Gobierno español diga que «nos va a transferir no sé cuántas transferencias» en un año, cuando lo que de verdad se ve es que tampoco el PSOE tiene intención de cumplir íntegramente el Estatuto, una ley orgánica, dejando fuera la Seguridad Social y postergando la competencia de prisiones.

El parlamentario Peio Urizar destacó que lo que subyace es «un modelo que se basa en la subordinación» de la parte vasca a la española, en el que «sale perdiendo toda la ciudadanía, porque nos siguen negando instrumentos necesarios para mejorar nuestro bienestar».

Por ello, EH Bildu asegura que «se vuelve a demostrar» que no hay más solución que la «relación de igual a igual con España» que se recoge en las bases del Nuevo Estatus.I.I.