Arnaitz GORRITI
BALONCESTO - EUROLIGA

Da gusto vapulear a Maccabi

Con Voigtmann y Hilliard como pilares anotadores, los gasteiztarras borraron al conjunto israelí en unos tres primeros cuartos excelsos.

KIROLBET BASKONIA 97

MACCABI TEL AVIV 73


No hace falta explicar los motivos por los que tan bien sienta ganar al Maccabi, más allá de lo útil que pueda resultar para la clasificación de la Euroliga. Pero ganarle de paliza supone un placer indescriptible, en parte por lo que supone batir a un rival que es algo más que un rival, en parte por la exhibición de los hombres de Perasovic en los tres primeros cuartos.

La primera mitad de Kirolbet Baskonia resultó de lo mejor de toda la temporada. Perasovic prescindió de Ilimane Diop de la rotación –entró en la segunda mitad, y acabó haciéndolo bien–, empleando como último pívot «útil» a Jalen Jones; desde luego, los «ocho magníficos» ofrecieron un rendimiento sencillamente espectacular. Johannes Voigtmann fue el máximo exponente del 54-41 al que se llegó al receso. El alemán resultó un dolor de cabeza irresoluble para la defensa macabea, puesto que martilleaba el aro israelí de igual forma desde el lanzamiento lejano como en el poste bajo.

Darrun Hilliard, autor de 19 puntos, fue la otra punta de lanza baskonista. Contrastaba su gran actuación con un banquillo visitante que se fue a los vestuarios sin añadir un triste punto –los puntos de los reservas macabeos llegaron con el partido decidido–, dejando en manos de O’Bryant, Wilbekin y Pargo toda resistencia en anotación. El escolta norteamericano, así como Shields, sepultaron de una vez por todas las dudas que a lo largo de la campaña han dejado en los aficionados. Hilliard vivió un idilio con el lanzamiento triple, mientras que Shields penetró con un brío que el Maccabi no supo parar en ningún momento. A tal punto, los de Perasovic tuvieron hasta 19 puntos de renta en la primera mitad, aunque los triples de Wilbekin y Pargo dejaron en «solo» 13 puntos la renta en tiempo de descanso: 54-41.

«Si queremos ganar, tenemos que defender mucho mejor», dijo el propio Perasovic antes de arrancar el tercer cuarto. Desde luego que sus pupilos de le hicieron caso, pese a sufrir para cerrar el rebote. Ioannis Sfairopoulos debió pedir tiempo muerto porque, tras un parcial de 10-2, el Baskonia superaba la veintena: 64-43.

El duelo, en lo restante hasta el final, fue una fiesta. Al Baskonia solo le faltó llegar a la centena –Miguel González dispuso el triple para ello–, solo porque en el último cuarto se tomaron la licencia para respirar. Los 10.517 espectadores que asomaron por el Buesa Arena pudieron vibrar con su equipo, al punto de que la renta llegó a los 25 puntos en el 95-90. Después del tortazo recibido ante Darussaaka, esto es otra cosa, ya que además de volver al Top 8, supera en el average particular a la escuadra macabea –así como al Armani Milano, circunstancia esencial cuando se prevé un tremendo atasco en las posiciones intermedias de la Euroliga–.

Bidaideak BSR, en la Champions

Por otro lado, Bidaideak Bilbao BSR se halla en Italia, fruto de ascender a la novena plaza del ranking europeo. Entre hoy y mañana, los de Esteban Nuñez se citan en la localidad italiana de Meda –cerca de las señeras ciudades de Cantú y Milán– con la Champions League.

Briantea Cantú, BG Baskets Hamburg, Galatasaray y Nevskiy Alyans –actuales campeones de Italia, Rusia y Turquía, y el tercero de Alemania– serán sus contrincantes en el grupo A de una máxima competición europea de baloncesto en silla de ruedas, dividida en tres grupos. Los bilbainos afrontarán sus cuatro partidos en el plazo de 30 horas, con el objetivo de colarse en los cuartos de final de la competición, con idea de hacerse con las dos plazas en juego.