Arnaitz GORRITI
BALONCESTO - EUROLIGA

El Top 8 se complica para el Baskonia

Anadolu Efes se impuso después de jugar un partido espectacular. Losgasteiztarras acaban la jornada sextos tras la derrota de Olympiacos en casa.

KIROLBET BASKONIA 92

ANADOLU EFES 102


Cuando todo estaba preparado para celebrar la clasificación a los cuartos de final de la Euroliga, las cosas se han complicado hasta el punto de convertir la última jornada en una oda a la cábala y a la quiniela. Anadolu Efes superó con todo merecimiento a los gasteiztarras, que se complican más de la cuenta su acceso al Top 8. Sin embargo, los de Perasovic acaban la jornada en sexta plaza, gracias a la derrota de Olympiacos frente a Zalgiris, una escuadra lituana que asciende al octavo lugar y convierte la zona de las 14 victorias en un tapón impresionante.

Llegará el momento de hacer cábalas, porque primero hay que rendir pleitesía al juego desplegado por los de Ergin Ataman, un entrenador despreciado demasiadas veces. En el parqué, exbaskonistas Larkin y Pleiss fueron una cuña dolorosa para el Baskonia, que además se encontró con el ex de Bilbao Basket Moerman con la muñeca afinada desde la larga distancia, por no hablar del clínic de dirección de un Micic que eleva su cotización por momentos.

Pese a la ausencia de Dunston, principal baluarte defensivo otomano, los de Ataman lucieron una variedad de recursos excesiva para el Baskonia. Shengelia estaba en el banquillo, pero todavía no estaba para jugar; Diop no dio el nivel durante sus ocho minutos de juego. Por ende, la rotación real de Perasovic fue de seis jugadores, y ante un rival que mantuvo una altísima proyección anotadora desde el primer segundo, la gasolina no alcanzó en el último cuarto.

Hundimiento en la pintura

Y eso que el Baskonia ganaba al descanso, 53-48, y parecía que tras un inicio zozobrante, los gasteiztarras habían conseguido enderezar el partido.

Anadolu Efes había anotado 10 de sus 15 triples en la primera mitad, mientras que Poirier y Voigtmann parecían superiores en la pintura. Sin embargo, Ataman cambió de plan tras el receso, viendo que Diop no estaba jugando bien y que Jalen Jones es muy irregular –aunque anoche jugó bien–. Por ende, cargó el juego hacia Pleiss para desgastar a Poirier. No es que el pívot alemán sea una bestia física, pero sus tremendos fundamentos técnicos trajeron por la calle de la amargura a Poirier, que acabó agotado y desquiciado.

Paradójicamente, fue otro exbaskonista como Beaubois el que metió a los gasteiztarras en el partido a causa de una técnica y sus cinco faltas. Pero cuando Micic sustituyó al escolta galo, Anadolu Efes, que en aquel momento ganaba por 73-76 ante un Buesa Arena encendido, volvió a escaparse y no miró atrás. Sendos triples de Moerman y el propio Pleiss elevaban el 78-91 a tres minutos del final, y a partir de ese momento todo el mundo empezó a pensar en el CSKA y los múltiples empates.