Arnaitz GORRITI
BALONCESTO - EUROLIGA

El CSKA espera en cuartos; los colegiados, también

Kirolbet Baskonia accede a los cruces pese a caer, tras la derrota de ArmaniMilano en Estambul. El triunfo de Panathinaikos hace que termine séptimo.

CSKA MOSCÚ 82

KIROLBET BASKONIA 78


Kirolbet Baskonia jugará los cruces de cuartos de final de la Euroliga después de que Anadolu Efes superara a Armani Milano. Pero más que alegría, hace falta sentir un enfado enorme con el partido de los gasteiztarras. No de los jugadores del Baskonia, sino de un arbitraje que hizo cuanto estuvo en su mano para que los de Perasovic no batieran al CSKA de Moscú. Cosieron a faltas al Baskonia y provocaron ¡39 tiros libres! de los rusos. El CSKA jugó con bastante poca tensión y jugadores como De Colo o Sergio Rodríguez parecieron estar lejos de su mejor momento. Aun así, después de tres cuartos de contención arbitral, entre Hackett y Clyburn remontaron el partido en el último período, merced a un parcial de 27-12.

Lo más gracioso es que los gasteiztarras tendrán que volver a Moscú para la eliminatoria de cuartos, después de los triunfos de Panathinaikos y Zalgiris –dejando a Olympiacos y Maccabi fuera de combate–. Es cierto que Garino y Shengelia estarán más en forma que ayer, y Perasovic especuló con el posible retorno de Janning, pero viendo los antecedentes de ayer, nada hace indicar que los tríos arbitrales vayan a ser más benévolos.

Huertas mereció más

El duelo empezó con lentitud, sobre todo por parte rusa. Así, pese a que el Baskonia se vio perdiendo 4-0, replicó con un parcial de 0-9 sin hacer nada especial. Esa reacción fue la tónica de la primera mitad, con Marcelinho Huertas ejerciendo de capitán general, autor de 13 de sus 17 puntos y director de unos gasteiztarras que marcaron siempre el ritmo y llegaron al descanso con 40-44 a su favor.

Pero en ese panorama había tres sombras. Una, el mal día de Vildoza; dos, las pérdidas; tres, las personales. Y a pesar de todo, Kirolbet Baskonia llegó al último cuarto con un 55-66 a su favor, dominando a un CSKA irreconocible que tuvo el sostén arbitral como principal argumento, pese a que se hartó de fallar tiros libres. En todo caso, los tiros libres errados por el baskonista Shengelia y los puntos de Higgins también contribuyeron a que los gasteiztarras no rompieran el partido.

Y en el período final, los de Itoudis vieron posible la remontada. Hackett martirizó a Huertas y Vildoza al poste bajo –que no podían defender a cuenta de las faltas– y Will Clyburn anotó 10 de sus 16 puntos en el período final, incluyendo un matazo en la cara de Poirier y un triple para adelantar a los moscovitas. Dentro de 11 días volverán a verse las caras; a ver si al Baskonia al menos le permiten competir.