Alvaro Reizabal
Abogado
JO PUNTUA

Lo que importa a la gente

Siempre que por cualquier motivo sale a la palestra el tema de la memoria histórica, de los crímenes fascistas durante la guerra y la posguerra, los arrojados a las cunetas, o de sacar a Franco del Valle de los Caídos, los del PP dicen que es retrogrado hablar de asuntos de hace ochenta años. De lo que hay que hablar es de las cosas que importan a la gente, aunque, a veces, su desvergüenza les lleve a decir que los rojos solo se acuerdan de sus padres enterrados cuando hay subvenciones. De lo que ellos quieren hablar es de bajar los impuestos a las grandes fortunas, o bajar el salario mínimo para fomentar la creación de puestos de trabajo.

Pero resulta que ahora también les gusta perorar sobre cosas que aunque son más viejas que la luna, parece que son de las que sí interesan a la gente.

Por ejemplo, Casado promete que cuando gobierne restringirá el traspaso de competencias a las autonomías desleales, o sea, la nueva versión de la normativa franquista que en 1937 privó a Bizkaia y Gipuzkoa del Concierto Económico, por ser provincias traidoras, al no haberse unido a la sublevación fascista. El mismo partido que se presenta como defensor del Concierto Económico porque está recogido en el Estatuto y la Constitución promete medidas contra las autonomías desleales. Por supuesto, la lealtad la valorarán ellos.

Otra muestra de lo que interesa a la gente según estos personajes es el tema del aborto, que disfrazan de proclamas provida y de protección a la familia. Debutó con gran éxito el hijo del que fuera jefe del Movimiento Nacional. Habló Suarez Illana de cómo abortaban los neandertales o ahora en Nueva York: después de nacer los niños. Luego, sin el menor decoro dijo que se había equivocado y que aquí no pasa nada.

Y ahora, la candidata a suceder a la cleptómana Aguirre saca a colación el tema del concebido y no nacido, el Nasciturus del Derecho Romano. Y lo hace en contra de lo que establece el Código Civil, que solo considera nacido el feto que viva 24 horas desprendido del seno materno. Otra ocurrencia.