CSKA MOSCÚ 68

KIROLBET BASKONIA 78

¿Y si Kirolbet Baskonia llega a su Final Four? Por primera vez desde aquel 6 de mayo de 2005, Saski Baskonia ganó en Moscú, volteando el factor cancha. Pero más que la victoria en sí, importa más el cómo: dominando.

Perasovic sorprendía alineando a Huertas y Shengelia en el quinteto titular en lugar de Vildoza y Poirier. Lo cierto es que el invento le salió bien. Con Voigtmann jugando de pívot puro, el juego de bloqueo directo central y pase a los tiradores en las esquinas le dio beneficios en los primeros instantes. Tanto fue así que Itoudis debió parar el partido al verse con un 10-17 adverso. El pero que nunca puede faltar, fueron las personales.

Los gasteiztarras llegaron a irse 12-21, fruto de un muy buen movimiento de balón rematado por un Shields que sumaba 10 puntos sin fallo, mientras que en el bando moscovita Sergio Rodríguez no se parecía en nada al del primer partido. El juego de pick’n roll volvía a desnudar las carencias rusas, con Poirier dando un muy buen relevo, siendo dominante en la pintura, para alcanzar el final del primer cuarto con 18-27.

El mundo al revés, Kirolbet Baskonia pasaba por encima de un CSKA de Moscú que no conseguía ni anotar, mientras la renta gasteiztarra se iba por encima de la decena después de un triple de Janning. Los moscovitas se chocaban continuamente contra un Poirier infranqueable, que además se permitía machacar el alley oop con Vildoza para afianzar su superioridad. Dos tiros libres de Hilliard elevaban la renta gasteiztarra hasta los 14 puntos: 20-34.

No obstante, algo pasó con el CSKA de Moscú después del primer triple del «Chacho» Rodríguez, que el CSKA de Moscú reaccionó, encadenando un parcial de 11-0 para arrimarse 31-34 y encender un Megasport Arena que olvidó sus habituales modos teatrales. Dos tiros libres de Shields cortaron la mala racha gasteiztarra.

Sin volverse loco, Kirolbet Baskonia volvió a meter a Poirier en danza, lo cual se notó para que los de Perasovic lograran un parcial de 0-4, provocando el tiempo muerto de Itoudis. Pero además, la presencia del pívot galo evitó canastas fáciles de Clyburn y no menos de dos de Othello Hunter.

Había que seguir machacando a un CSKA atontado, y de la mano de Poirier el resultado se estiró hasta un 33-42. Un nuevo triple de Sergio Rodríguez y un tiro libre de Clyburn dejaron, sin embargo, el luminoso en un 37-42 al descanso. Un resultado facilitado por algunas decisiones arbitrales, como las terceras personales de Shengelia y, sobre todo, Vincent Poirier.

«Carácter Baskonia» es esto

Sin Poirier, guardado por las faltas, había que aguantar, y Kirolbet Baskonia aguantó. Primero fue Garino, sumando seis puntos consecutivos, para que luego Shengelia sorprendiera con otros cinco puntos seguidos. Itoudis, al ver que su CSKA se estaba limitando a la genialidad de Sergio Rodríguez, pedía tiempo con 47-53.

Pero los gasteiztarras no perdían la concentración y se empezaba notar cierta desesperación moscovita en forma de malos pases o tiros precipitados. Mientras, Shields lograba un «dos más uno» y un apagado Vildoza despertaba con un triple que elevaba el 52-63, y nuevo tiempo de los rusos, antes de llegar al final del cuarto con 52-66, con un triple de Hilliard.

El CSKA se decidió a la presión defensiva a la desesperada, robando varios balones. Los nervios estaban a flor de piel, y todo el mundo fallaba... excepto Hilliard. Y con Poirier de stopper, Kirolbet Baskonia lograba lo que parecía imposible, porque le infligió al CSKA su primera derrota en los play offs. Zurbano tiene que ser decisivo.

«Cuando nos unimos, es complicado ganarnos»

Quiso huir de todo triunfalismo Velimir Perasovic, pero dejó perlas preciosas en su alocución. «Poirier ha hecho un partidazo. es una barbaridad capturar 15 rebotes en 21 minutos de juego. Pero lo cierto es que no puedo destacar a uno o a otro. Todos han aportado, y es que cuando nos unimos, es muy complicado ganarnos», explicó.

Asimismo, dejó una carga de profundidad sobre un arbitraje que varió tras el descanso. «Hemos hecho un partido bastante sólido, en el que todos los jugadores han salido con un deseo enorme. Pero claro, hay que reconocer que nos hemos encontrado con un arbitraje totalmente diferente que nos permitía defender. Ha sido una de las claves», dijo.A. G.