Se acabó. Tras tres intensos días, ayer tocó recoger las tiendas de campaña y emprender el viaje de regreso a casa. Muchos no olvidarán la experiencia vivida en Gazte Topagunea de Lemoa, donde este fin de semana se han dado cita más de 8.000 personas, sobre todo jóvenes.

En un vídeo difundido a través de las redes sociales, Izar Hernando, nueva portavoz de Ernai, recordaba que hace casi un año Ernai y Aitzina pusieron en marcha la dinámica “Bulkada berrien garaia da”, y marcaron un objetivo: sumar a las nuevas generaciones a la lucha en pro de una Euskal Herria libre, socialista y feminista, «aprovechar su fuerza y su creatividad».

«Y haciendo un balance del curso que está a punto de acabar, y de Gazte Topagunea, que ha finalizado ya, creemos que esa misión se ha cumplido y que esa fuerza y esa creatividad ya se percibe en la lucha y en el trabajo diario», manifestó antes de apuntar que ahora toca llevar a la práctica todo lo aprendido durante estos días, en los que se han sucedido los coloquios, los talleres y los conciertos.

Estos últimos han sido, sin duda, los que más personas han congregado, al igual que el acto central, celebrado el sábado por la noche bajo el lema «Bulkadak gara!». Allí se hizo un llamamiento a generar una «ola joven emancipadora», que frene a la derecha.

«Somos imparables y seremos decisivos, y el próximo domingo llenaremos las urnas de votos independentistas, feministas y antifascistas, llenaremos las urnas de votos a EH Bildu. El domingo tenemos otra batalla», manifestaron los portavoces de los movimientos juveniles.

Otro de los actos que congregó a cientos de personas fue la intervención del coordinador general de EH Bildu, Arnaldo Otegi. Este traslado un mensaje esperanzador a los jóvenes, que, como indicó, «tienen derecho a vivir en otro tipo de sociedad, en una sociedad que defienda los derechos. Y para ello hay que construir una República Vasca, una República Vasca que proteja los derechos de los jóvenes».

Además, los asistentes a Gazte Topagunea ofrecieron un sentido homenaje a las madres y padres de los jóvenes represaliados en la década de los 90, reunidos en la organización Gurasoak, y pudieron escuchar el relato de personas que han vivido en primera personas las leyes de excepción impuestas por los estados español y francés.

Asimismo, se organizaron coloquios sobre la denominada «Ley Mordaza», la lucha por la igualdad del feminismo y de los colectivos LGTBIQ, la precariedad laboral y las experiencias de colectivos juveniles procedentes de otras naciones.