Ion SALGADO
GASTEIZ

El TSJPV declara nulo el despido de una trabajadora por estar embarazada

El caso de esta mujer, trabajadora en el Hotel Palacio de Elorriaga de Gasteiz, fue denunciado el pasado mes de enero por el sindicato LAB, que también alertó de dos casos de acoso sexual en otras empresas.

El pasado mes de enero, LAB denunció tres casos de discriminación sexista y de violencia machista ocurridos en diferentes empresas de Araba. Se trataba de un despido por embarazo y dos de acoso sexual en el puesto de trabajo. Ayer, la central abertzale anunció una «buena noticia». «Hemos ganado el juicio por el despido de una trabajadora por estar embarazada», señaló la responsable de la Secretaría Feminista, Eli Etxeberria.

«Ante las mentiras de la empresa, ha quedado constancia de que la discriminación que enfrentamos cada día las mujeres en el puesto de trabajo es algo real. El capitalismo funciona muy bien cuando trata de quitarnos de en medio si ya no producimos según su concepto de producción o cuando el sistema quiere que volvamos a los hogares porque recorta servicios públicos para privatizarlos», añadió en una rueda ofrecida en la sede que LAB tiene en Gasteiz.

Remarcó que, ante las «tramas y las estrategias del sistema», LAB seguirá denunciando «todos y cada uno de los casos de violencia machista en el espacio laboral». «Animamos a todas las mujeres a que denuncien este tipo de casos de manera organizada y colectiva. Animamos a todas las mujeres a que no dejen pasar ninguna presión. Solo mediante la defensa y el acompañamiento colectivo vamos a poder parar esta situación de discriminación», señaló.

Asimismo, instó a las instituciones implicadas a que «obliguen a las empresas a poner en marcha medidas que acaben con situaciones de discriminación y que sancionen a las que lo incumplan». «Exigimos a Inspección de Trabajo que ponga en marcha medidas preventivas. Exigimos a las empresas y a las instituciones que elaboren y apliquen protocolos contra el acoso sexual y por razón de género, y que aseguren entornos de trabajo libres de toda violencia y discriminación contra las mujeres», aseveró antes de ceder la palabra a Iraia Onaindia, de la Federación de Servicios Privados de LAB.

Readmitida en su puesto

Onaindia recordó que la trabajadora despedida por estar embarazada era empleada en el Hotel Palacio de Elorriaga, que ha tenido que readmitirla después de que el Tribunal Superior de Justicia del País Vasco (TSJPV) haya declarado nulo el despido.

«En este caso de discriminación, activamos el piquete feminista, una de las herramientas que tenemos las mujeres en el sindicato para señalar a las empresas que nos discriminan por el hecho de ser mujeres y, vista la sentencia, ha quedado claro que merece la pena luchar y denunciar», afirmó.

Recordó que la central abertzale también denunció un intento de agresión sexual ocurrido el 2 de noviembre en una subcontrata de la Diputación de Araba: «El agresor fue condenado por un delito leve de coacciones y se le impuso una orden de alejamiento. Pues bien, el agresor recurrió y ha sido absuelto tanto por el delito como por la orden de alejamiento, quedando así la trabajadora totalmente desprotegida por parte esta Justicia; en este caso, injusticia».

También se refirió al tercer caso denunciado por LAB, que a comienzos de este año alertó del acoso sufrido por una trabajadora de Transportes Hombres Barreira «por parte de sus compañeros y con la complicidad de la empresa». «La denuncia está en manos de la Inspección de Trabajo desde el pasado mes de enero, mientras la trabajadora sigue de baja. Por si fuera poco, uno de los acosadores denunciados ha sido designado por la empresa para ser uno de los que realice el plan de prevención de riesgos sicosociales», censuró.

Más casos similares

Cabe señalar que en la comparecencia de ayer, Etxeberria insistió en «la importancia de la socialización de estos casos, así como de su denuncia».

«Nos parece que la violencia machista, cuando se da en el mundo laboral –precisó–, es aún más difícil de denunciar debido a las diferentes relaciones de poder que se establecen, la amenaza de la perdida del empleo y el cuestionamiento permanente de nuestra palabra».

En este sentido, indicó que LAB está recibiendo denuncias de mujeres que están siendo despedidas por estar embarazadas. «Para nosotras denunciar estos casos y hacerlos públicos es fundamental para que sirva como ejemplo, para que otras mujeres sepan que existe esta forma de denuncia», subrayó.