Iñaki ZARATIEGI
DONOSTIA

Joan Baez inaugura hoy Jazzaldiacon su gira de despedida

Enfilando los 80 años de edad y tras 60 de andadura musical, la influyente intérprete neoyorquina dice adiós a las grandes giras. Su último tramo recala en la capital guipuzcoana, abriendo el programa gratuito de la playa de Gros. Voz seminal de la canción protesta y artista comprometida durante toda su vida, emocionará una vez más con su sensibilidad creativa, las canciones de combate y su personal lectura del «Txoria txori» euskaldun.

“Que te vaya bien” (“Fare Thee Well Tour”) proclama el título de la última gira de la veterana cantante norteamericana Joan Chandos Baez (Nueva York, 9 de enero de 1941), que inaugura esta noche las dobles sesiones de la playa de la Zurriola del 54º Jazzaldia donostiarra. El próximo enero tendrá 78 años y los cumplirá fuera de los escenarios. En mayo celebró su despedida americana en Port Chester, Nueva York. Su última andadura internacional ha recorrido Europa y recala al sur de los Pirineos: la visita al macroescenario de Gros y tres recitales más, dos en Catalunya y el final de fiesta el día 28 en el Teatro Real de Madrid. Habrá acumulado sesenta años de carretera desde que debutó en 1959 en el emblemático Newport Folk Festival.

Su poderoso timbre de soprano, de agudo vibrato y reconocible falsete, era el contrapunto más clásico a muchas de las voces country y folk, menos sofisticadas, y en particular a la lijosa manera de entonar de su partenaire Bob Dylan. Radicalmente independiente y luchadora infatigable, ha sido un espejo en el que se ha reflejado la tradición musical norteamericana e internacional y, a tono con los tiempos, fue introduciendo toques de rock y pop en su repertorio. Una colección de canciones mayormente ajenas a las que ha dado su particular punto de vista musical.

«Nací con un don», ha solido confesar respecto a su habilidad cantora y cita un concierto del influyente Pete Seeger, al que le llevó de niña una tía, como el momento clave de su decisión por ponerse detrás de un micro. A los viejos aires del cancionero popular y las primeras versiones de Dylan se fueron añadiendo títulos de los Beatles-John Lennon, Bob Marley y otros grandes del pop más una selección de aires de América latina (tradicionales mexicanas, Violeta Parra…).

No nos moverán

Las ideologías y prácticas derivadas de sus juveniles años hippies han asentado un temple vital e ideológico que ha tenido una influencia mayor entre sus seguidores y parece que le han deparado una vida sana. «Mi madre no tuvo enfermedades graves y murió a los 100 años. Mi padre a los 94 y con sus dientes y pelo enteros. Me cuido y tengo mucho por vivir. Sigo el método postural Gokhale de las mujeres nativas, hago meditación, pilates, yoga y 40 minutos diarios de paseo. Me encanta pintar, y también bailar; igual me apunto a clases de bailes latinos».

Debutó en la península ibérica en 1977, con Franco recién muerto, en el programa “Fiesta” de TVE y entonó un “No nos moverán” que dedicó a Dolores Ibarruri “La Pasionaria”, figura del comunismo español. «Fue un gran momento para mí. Visitar un lugar que acaba de librarse de una dictadura es siempre excitante. Y la de Franco había durado 40 años. Me sentí honrada por poder homenajear a una mujer luchadora. Podía estar más o menos de acuerdo con ella, pero había que reconocer su defensa de un ideal de justicia», afirma.

En su visita a la Plaza de Toros de Bilbo en 1998 grabó el disco en directo “Diamonds and Rust in the Bullring”. Pasó de nuevo por Bilbo (Euskalduna) y ha actuado en Iruñea (Anaitasuna y Baluarte) o Biarritz (Gare du Midi). Ha dejado caer que la última canción que entonará en Madrid, en su despedida de las giras, será “No nos moverán”. Genio y figura.

 

La abuela más combativa se moja con la situación política de Catalunya

En el siglo pasado Joan Baez adquirió popularidad actuando junto a Martin Luther King o con Bob Dylan, siendo encarcelada y convirtiéndose en la artista-activista por excelencia que se ha manifestado contra la pena de muerte, las guerras y causa diversas. Por ejemplo, los derechos nacionales catalanes. El pasado día 4 visitó en la ciudad belga de Gante a Carles Puigdemont, le invitó a su concierto y le dedicó la canción “Rossinyol”. Después denunció en TV3 la situación y declaró querer visitar a los presos “Jordis” durante su estancia en Catalunya: «Siempre me ha movido la justicia y su situación es injusta».

Su repertorio alberga himnos políticos como “Sacco and Vancetti” o “We Shall Overcome” y en el disco que grabó en directo en Bilbo en 1988 incluyó “Txoria txori”. Esta noche, ese será el momento cumbre de su despedida de Euskal Herria.I.Z.