Koldo LANDALUZE
ESTRENO

«Intocable», el documental que revela la conducta silenciada de Harvey Weinstein

Las denuncias de acoso sexual contra el productor estadounidense Harvey Weinstein, que comenzaron a desvelarse a finales de 2017 dando inicio a una larga lista, han sacudido todo el planeta. Ahora, el recién estrenado documental «Intocable» lo lleva a la gran pantalla.

Las salas de cine e internet acogerán el inminente estreno de “Intocable”, el documental respaldado por la BBC y dirigido por Ursula Macfarlane que denuncia los casos de abuso sexual de Harvey Weinstein y el silencio cómplice que le permitió actuar con total impunidad durante décadas en Hollywood.

Tanto la gran pantalla como la pequeña comienzan a acoger los primeros proyectos que, desde ópticas como la ficción o el documental, inciden en los diferentes casos de abuso sexual que convulsionan la industria del entretenimiento.

Siguiendo la estela de la película de Jay Roach titulada “Bombshell” y basada en las mujeres que señalaron al todopoderoso responsable de Fox News, Roger Ailes, diferentes salas de cine han estrenado este pasado viernes –tras su paso por la plataforma Hulu en Estados Unidos y antes de ser difundido vía internet– el documental “Intocable”.

Dirigido por Ursula Macfarlane y producido para la BBC por Óscar Simon Chinn –el oscarizado director del documental “Searching for Sugar Man”–, centra su interés en el ascenso y caída del magnate Harvey Weinstein y cuenta con el testimonio de las mujeres que se convirtieron en sus víctimas, tanto directas como aquellas que se vieron afectadas por su comportamiento.

Entre las primeras, tres de sus secretarias personales que se despidieron porque no podían soportarlo, figura Kathy Declesis, una de las primeras en sentenciar públicamente que «Harvey es un cerdo».

«Soy el puto sheriff»

A lo largo del documental también asoman las presencias de actrices como Rosanna Arquette, Paz de la Huerta y Erika Rosembaum, que presta al comienzo del filme algunas de las frases más demoledoras y esclarecedoras, como la que relata que «él era enorme, yo pesaba 45 kilos». Rosembaum revela asimismo que había escuchado rumores sobre «algunas mujeres que pasaban por cosas así para lograr papeles. Yo pensaba que era suficiente con decir ‘no’. Pero estaba equivocada».

El documental explora la vida de Harvey Weinstein, el otrora todopoderoso productor de la compañía Miramax que siempre enarboló su conocida frase de guerra, «soy el puto sheriff de este puto pueblo».

En relación al modus operandi que empleaba este magnate para ocultar sus abusos con las mujeres, se muestra que –tal y como afirman ante la cámara varios altos cargos de Miramax– se basaba en poner precio al silencio, pero cuando su obsesión aumentó, recurrió a investigadores para desprestigiar a sus víctimas. Entre ellos figuraban agentes de Black Cube, una agencia privada de espías que presta sus servicios al Mossad.

Colegas arrepentidos

Según ha avanzado Simon Chinn, uno de los productores de este documental, «hicimos una lista con más de 600 nombres de personas que conocían bien la historia y contactamos con casi 400; 128 de ellas estaban dispuestas a hablar, aunque muchas no querían mostrarse ante la cámara. Al final, fueron 29 las personas entrevistadas durante los nueve meses que duró el rodaje».

Por su parte, la directora Ursula Macfarlane añade que «esta historia era algo personal para casi todos con quienes hablé sobre los sucesos que protagonizó Harvey Weinstein. Además de mujeres de las que abusó, hay testimonios de antiguos colegas que hablan porque se sienten culpables y se arrepienten de no haber hecho nada para detenerlo. También contamos con el testimonio de Lauren O’Connor, la joven empleada de The Weinstein Company cuyo memorándum interno se filtró al diario “The New York Times” y, en octubre de 2017, desencadenó la publicación que terminó derrocando a Weinstein».

A modo de epílogo, Ken Auletta –escritor y periodista del “The New Yorker” que publicó uno de los perfiles más profundos sobre Weinstein– dice ante la cámara: «si eres Harvey y eres un chico gordo de Queens y de repente tienes poder, lo que imaginas no es charlar con esas mujeres, sino poseerlas. Él solía aprovecharse de los sueños de las mujeres y contaba con el suficiente poder para llevarlo a cabo».

Oleada de denuncias que sigue su proceso en los tribunales

La aparición de las primeras denuncias por acoso sexual en octubre de 2017 pusieron sobre las cuerdas al magnate de Hollywood Harvey Weinstein. No solo porque el rechazo a la violencia sexual brotó a través el lema #MeToo, que terminó por hacerse global y convertirse en todo un movimiento, sino porque algunas de las denuncias han llegado a los tribunales.

El último de estos episodios tuvo lugar el pasado 26 de agosto, cuando Weinstein volvió a declararse «no culpable» de las acusaciones de violación realizadas por la actriz Annabella Sciorra ante un juez de Nueva York, que decidió aplazar todo el proceso al 6 de enero. Con la aceptación de las denuncias de Sciorra, conocida por su papel en la seria “Los Soprano” y que alega que Weinstein la violó en 1993, son ya tres los casos a los que debe responder el magnate de Hollywood. Antes de este último caso, el productor estaba imputado por violación en un hotel de Manhattan en 2013 a una mujer que permanece en el anonimato, y de practicar sexo oral de manera forzada en 2006 a la ayudante de producción Mimi Haleyi. Weinstein se encuentra en libertad condicional tras el pago de una fianza de un millón de dólares después de que se declarase «no culpable» en una vista preliminar en julio de 2018.GARA