SASKI BASKONIA 78

IBEROS. TENERIFE 75

A pesar de la ausencia de Pierria Henry y Stauskas, a pesar de los muchos desajustes que hay que corregir, Kirolbet Baskonia pudo disfrutar de un triunfo bien trabajado del Trofeo Araba, despedida de la pretemporada ante un muy correoso Iberostar Tenerife que puso las cosas muy difíciles hasta el final.

Y mucho más que pudo haber apretado, toda vez que durante la primera mitad estuvo ganando con claridad, hasta de un máximo de 13 puntos de ventaja, un 21-34 fruto del tremebundo acierto en el triple de Sasu Salin, autor de seis de sus siete triples antes del descanso. Con todo, el gran partido de Youssoupha Fall, máximo anotador del Baskonia con 17 puntos y Shavon Shields evitaron un estropicio mayor, llegándose al descanso con 37-44 en el marcador.

Del parcial a la emoción

Las cosas cambiaron radicalmente tras el receso, ya que los de Velimir Perasovic saltaron con mucha mayor tensión defensiva. Tanto es así que lograron voltear el marcador con un parcial de 14-2. En adelante, Kirolbet Baskonia llevó la iniciativa en el marcador hasta el final del partido.

No obstante, los de Txus Vidorreta no le perdieron la cara al choque, a pesar de las dificultades que Fall provocaba con sus 221 centímetros. Shermadini, que tampoco es un enano con sus 2,17 metros, le daba buena réplica al senegalés, al tiempo que Singler, otro de los buenos fichajes de un Iberostar Tenerife que aspira a estar en la parte alta de la Liga ACB, daba un paso adelante recordando a los gasteiztarras su exitoso pasado en el Real madrid y una sólida carrera –poco brillante, eso sí– en las filas de Oklahoma City Thunder durante varios años. Así las coas, el partido llegó al último cuarto con las espadas en todo lo alto: 57-55.

Por si faltaba algo de picante en el partido, los árbitros también se lo tomaron bien en serio, castigando hasta tres faltas como antideportivas, al tiempo que señalaron una técnica a un Marcelinho Huertas muy motivado contra su exequipo. Por ello, aparte de ganarse una falta técnica, dejó en la retina varias canastas marca de la casa, saltando a una pierna y lanzando a tablero, o alguna que otra asistencia de clase pura para el pívot Shermadini.

El partido entraba en su fase culminante y aunque Txus Vidorreta ensayaba algún amago de zona y daba entrada a jóvenes como Cabrera, Iberostar Tenerife se había convertido en una garrapata de la que los gasteiztarras no conseguían librarse. Más aún, cuando un casi inédito Santi Yusta dio una muestra de sus capacidades al empatar a 73 después de un «dos más uno» la mar de meritorio.

Llegaba la hora de la verdad y ahí los principales puntales del Baskonia tuvieron algo que decir. Primero fue Tornike Shengelia, autor de una canasta clave en el devenir del partido. Tras el fallo posterior de Iberostar Tenerife, fue un triple de Granger, que compareció justo a tiempo para finiquitar el partido –y que compartió bastantes minutos con Vildoza, pese a que Miguel González salió de titular y no jugó nada mal–, por mucho que Yusta pusiera desde la línea de tiros libres el 78-75 final y una presión a toda pista del cuadro aurinegro cerca estuvo de causar algún disgusto.

En resumen, el Trofeo Araba se volvió a quedar en las vitrinas de Kirolbet Baskonia, y aunque todavía quede un mundo por mejorar, las sensaciones fueron bastante buenas.