La Real disputa esta tarde el primero de los dos partidos que presenta una semana que puede acabar en cabeza de la tabla porque el domingo visita al líder Granada, el único equipo que supera los 19 puntos en 10 jornadas de los de Imanol, el Barcelona, el Atlético de Madrid y el Sevilla. Antes los blanquiazules buscarán hoy su cuarta victoria en el quinto partido en el nuevo Reale Arena ante un Levante que llega en su peor momento con una victoria en los últimos siete partidos, en los que ha sumado solo cinco puntos.

Como Rubi y Escribá en los dos anteriores encuentros de los realistas, Paco López llega cuestionado a Donostia a pesar de que en el año y medio que lleva en el banquillo del Levante evitó un descenso que parecía seguro y ha mantenido a su equipo lejos de la zona de máximo riesgo.

Imanol manifestó ayer en la sala de prensa de Zubieta antes del entrenamiento que dirigió a puerta cerrada a la tarde que cuenta con Martin Odegaard a pesar de los problemas físicos con los que acabó el partido del domingo en Vigo: «Si mejora como desde el partido hasta el día de ayer, espero que no tenga ningún problema y esté al 100% para jugar. Estos jugadores están habituados a jugar cada tres días y, si ha evolucionado como espero, tendrá posibilidades de jugar contra el Levante».

El técnico oriotarra dará la convocatoria hoy mismo y tendrá las bajas de Aritz Elustondo, Aihen Muñoz y Asier Illarramendi tras incorporarse Zurutuza y Pardo a los entrenamientos tras superar los problemas de las últimas semanas.

Al disputarse tres encuentros en ocho días es posible que, como en la anterior jornada entre semana ante el Alavés, Imanol introduzca algunos cambios con respecto al equipo que jugó el domingo en Balaídos. Entonces Gorosabel y Guevara, que ha jugado los tres últimos partidos de Anoeta y debutó en Primera la pasada temporada con un buen partido ante el Levante, tuvieron sus primeros minutos de la semana y no sería extraño que repitan de inicio para dar descanso a Zaldua y Zubeldia.

Está por ver la respuesta de Imanol tras el enfado de Willian José tras ser cambiado en Vigo y marcar Isak. También el brasileño se enfadó al ser el primer cambio contra el Athletic y se quedó en el banquillo en el siguiente partido con el Atlético.

El técnico oriotarra pidió el apoyo de la afición porque espera un partido «más trabado» por las características del Levante, que no querrá discutir como Betis y Celta la posesión de balón. Por eso puede ser necesario tener paciencia para superar a un equipo que no encaja muchos goles en la mala racha en la que se encuentra, cuatro en los cuatro últimos partidos, pero tiene problemas en ataque y solo ha marcado cuatro tantos, dos de ellos en Leganés, en las seis jornadas más recientes.

«No me preocupa nada»

Ante esa mala racha Paco López trasmitió ayer que «no me preocupa nada en absoluto. No me importa lo que haya sido, lo que puedan hacer… Si hubiese una máquina de la verdad, veríais que soy sincero. Que me da igual, que llegué a este club con unas ganas tremendas de disfrutar el día a día. Todos queremos progresar y ganar más, pero no me preocupa y tengo otros valores en mi vida».

Recordó que «me gustaría que las cosas me fuesen sensacional, pero cuando las cosas me han ido muy bien y recibía elogios, que no es hace mucho, yo era el más tranquilo porque sé cómo funciona esto. Donde me centro y lo que me importa es disfrutar mi trabajo y equivocarme lo menos posible, que para unos es mucho y para otros menos».

Del partido de hoy Paco López dijo que ganarlo «es un reto complicado y difícil que no ha hecho ni el Atlético de Madrid. No me ha sorprendido en absoluto el buen arranque de la Real. Conozco los jugadores y lo que se genera en Anoeta con todo el campo cerrado». A pesar de que el encuentro se juega entre semana, tampoco es demasiado tarde y se espera una buena entrada.

Imanol huye de la euforia y critica a Willian José

Imanol se desmarcó de la euforia y los elogios que recibe su equipo y señaló ayer que «tampoco estamos jugando tan bien como quiero y soy el primer culpable de que el equipo no juegue tan bien. Soy muy exigente con lo que hago y entiendo que con la plantilla que tenemos nos faltan puntos. No porque los jugadores no hagan lo que les he pedido, sino porque no les he ayudado lo suficiente. Soy autocrítico, tengo a todo el equipo que suma en el día a día, pero como repito las últimas semanas, no hemos hecho nada. Ha habido fases de buen juego y hay que darles continuidad. Pero tiene valor que un día que no estuvimos finos del todo porque seguramente el rival hizo algo bien sacamos los tres puntos».

Pese a esa respuesta dejó claro que «estoy muy contento, pero no vale la clasificación hoy en día. Soy consciente de donde estoy, de la responsabilidad que tengo y sé que si pierdo cuatro partidos seguidos me van a señalar y mi puesto estará en entredicho. Es el fútbol actual, no hay euforia y no miro la clasificación. Hay compromiso, trabajo, responsabilidad y solo miro el partido siguiente ante el Levante».

Sobre la rabia de Willian José y los dos botellines de agua que arrojó tras ser cambiado en Vigo, dijo que «se enfada por el cambio y es bueno. Había seis enfadados en el banquillo y otros cinco enfadados que no viajaron. Es importante que un jugador se enfade cuando un entrenador lo quita. Yo como jugador y como entrenador he tirado más de una botella, quiero jugadores que quieran jugar siempre, pero él sabe que las formas no fueron las correctas. Salió enfadado, pero luego estaba contento porque el equipo ganó y llevamos 19 puntos».

En la misma línea, preguntado por Januzaj, Imanol dijo que «los jugadores se entrenan bien y si no juegan es porque el resto lo hacen muy bien y llevamos 19 puntos. Eso no quiere decir que el resto lo haga mal. Están bien, pero tengo que elegir once y al resto le toca trabajar como lo están haciendo. No hay ningún problema dentro del vestuario. Todos son conscientes de lo que hace el equipo y deben apretar y esperar el momento». J.I.