Javier Aguirre Fernández falleció en un hospital madrileño tras una larga enfermedad, a los 84 años. El cineasta, nacido en Donostia, recibió el pasado mes de octubre, junto a su pareja, Esperanza Roy, la Medalla de Oro de la Academia española de las Artes y las Ciencias Cinematográficas, según anunció esta institución, concedida a ambos por ser «dos miembros del sector cinematográfico con muchos años de oficio».

Nacido el 13 de junio de 1935 en el seno de una familia burguesa –su padre era industrial–, Aguirre se negó a seguir los estudios que su familia le marcó –una carrera técnica– y con tan solo 15 años empezó a colarborar con periódicos y revistas especializadas de cine.

A los 19 años realizó su primer corto amateur y en 1955 fundó y dirigió el Cine Club de Donostia. Un año después se trasladó a Madrid e ingresó en el Instituto de Investigaciones y Experiencias Cinematográficas (IIEC).

Realizador, guionista, productor y director de fotografía, a este cineasta donostiarra siempre le interesó el «anticine», según su propia definición, e indagar en el lenguaje. Lo inauguró en 1967 con obras como “Fluctuaciones entrópicas”, “Pluralidades 6”, “Espactro 7”, “Uts Cero”, “Innerzeitigkeit”, “Objetivo 40”, “Tautólogos plus X” (1973) y “Underwelles” (1973).

Teorizó sobre ello en un libro publicado en 1972, “El anti-cine. Apuntes para una teoría”, películas que no se pueden encerrar en los límites del séptimo arte y que se inmiscuyen en terrenos de otras disciplinas.

Su amplia filmografía supera los 80 títulos. En 1987 estrenó “La monja alférez”, historia ambientada en el siglo XVII y que narra la vida de Catalina de Erauso, una mujer que escapó de un convento y se embarcó a América como soldado. Protagonizada por Esperanza Roy, era un proyecto del director desde su infancia.

Protagonista de “(aguirre)”, documental que se presentó en el Festival de Málaga, su último trabajo estrenado fue “Sol”, sobre la madrileña Puerta del Sol rodado en dos épocas, de 1967 a 1970 en blanco y negro, y la contemporánea filmada entre 2005 y 2009 en color.

A lo largo de su trayectoria llegó a conseguir hasta 20 premios estatales e internacionales entre los que destacan una medalla de bronce en Venecia, una Espiga de Oro en Valladolid o una medalla de Plata del Consejo de Europa.