Iñaki IRIONDO
GASTEIZ
ACUERDOS PRESUPUESTARIOS

EH Bildu sube el techo de gasto para dejar aprobar las cuentas de Nafarroa

EH Bildu anunció un preacuerdo con el Gobierno de Chivite para no presentar enmienda a la totalidad, rechazar las que pudiera haber y facilitar la aprobación de los presupuestos.

Elevar el techo de gasto, además de acuerdos específicos sobre políticas públicas para implementar a lo largo de este año, son las bases sobre las que EH Bildu ha alcanzado un preacuerdo con el Gobierno de María Chivite, que inicialmente le debería posibilitar la aprobación de los presupuestos de 2020, una vez que se cumplan todas las condiciones pactadas. El preacuerdo fue luego confirmado por el Ejecutivo navarro.

A media tarde de ayer, la formación de izquierda soberanista hizo publicó un comunicado en el que anunciaba que «tras semanas de negociaciones, EH Bildu y el Gobierno de Navarra han alcanzado un preacuerdo para el Proyecto de Presupuestos 2020».

Explicaba que «el mencionado preacuerdo contempla un incremento del techo de gasto que va a posibilitar» a su grupo parlamentario «la presentación de enmiendas con el objeto de mejorar el proyecto de presupuestos desde el punto de vista de cohesión territorial, así como de fortalecimiento de los servicios públicos y los derechos de la ciudadanía».

Además, según se recogía en el escrito, «con estos mismos objetivos» el Gobierno de Nafarroa y EH Bildu han alcanzado también lo que se describe como «acuerdos específicos respecto a las políticas públicas que se desarrollarán a lo largo de 2020 y que se plasmarán en el trámite parlamentario y acción posterior del gobierno».

Son puntos que no se especifican en la nota, probablemente por razones de discreción en este momento inicial del anuncio del preacuerdo.

«Posibilitar la aprobación»

El comunicado de EH Bildu recoge que una vez «llegados a un acuerdo de estas características», la formación de izquierdas «se ha comprometido a no presentar una enmienda a la totalidad al proyecto de presupuestos presentado por el ejecutivo y a votar en contra de las enmiendas a la totalidad que pudiera haber», que no será otra que la que previsiblemente vaya a presentar la coalición derechista Navarra Suma.

Pero el mencionado preacuerdo contempla también el compromiso de EH Bildu de «posibilitar la aprobación de los presupuestos».

El Gobierno lo ve «positivo»

El Gobierno de Chivite también hizo público un comunicado en el que afirmaba que valora «positivamente» el preacuerdo alcanzado por parte del Ejecutivo foral con el grupo parlamentario de EH Bildu en el Parlamento navarro, incidiendo en que se han alcanzado una serie de compromisos específicos de «carácter social» y de «fortalecimiento de los servicios públicos» que se materializarán por parte de los grupos políticos que sustentan al Gobierno y el grupo parlamentario de EH Bildu, tanto en el trámite de enmiendas como a lo largo del ejercicio presupuestario.

A juicio del Gobierno de Nafarroa, «en una comunidad tan plural como la navarra, la ciudadanía reclama a sus representantes la capacidad de dialogar y acordar propuestas que redunden en beneficio directo de la sociedad, en términos de mayores cotas de progreso, fortalecimiento de los servicios públicos, apuesta por la innovación, avanzar en la cohesión social y territorial, y en la igualdad entre mujeres y hombres».

A esto añadía la consideración de que «finalmente pueda haber unos presupuestos que afronten los retos que tenemos como sociedad es sin duda una buena noticia para todos y cada uno de los ciudadanos y ciudadanas de la Comunidad Foral».

Única vía ante la derecha

Como ocurrió en la investidura de María Chivite, buscar algún tipo de acuerdo con EH Bildu era la única forma de la actual coalición de Gobierno de quedar fuera de los manejos de la derecha agrupada en torno a Navarra Suma, que desde hace tiempo viene dando muestras de su verdadero talante tanto en la Cámara foral como en el Congreso de los Diputados.

Precisamente, dentro de lo esperable cabía su primera reacción en Twitter tras conocer el preacuerdo, acusando a María Chivite de seguir «al pie de la letra el guión que Bildu le marcó en su investidura».

Bien distinta fue la respuesta tanto de PSN como de Podemos, quienes en palabras de Ramón Alzórriz y Mikel Buil, respectivamente, manifestaron su satisfacción por el anuncio.

«Este Gobierno ha entendido el mandato de la ciudadanía al poner de manifiesto que gracias al diálogo entre diferentes se pueden alcanzar pactos para mejorar las cuestiones que le importan en su día a día», destacó Alzórriz.