D entro de la filmografía de Olivier Nakache y Éric Toledano este séptimo largometraje, titulado originalmente “Hors normes” (2019), es el más comprometido e importante en la vertiente social de su cine. Previamente tuvieron que hacer el cortometraje “On devrait en faire un film” (2015) como propuesta para el proyecto, y ahí aparecían los personajes verdaderos de los cuidadores Stéphane Benhamou y Daoud Tatou, para cuyas respectivas ONGs Le Silence des Justes y Le Relais IDF irá el cinco por ciento de la recaudación de la película, que de momento está haciendo una buena taquilla y ha superado los 20 millones de dólares. Su presentación en la Clausura de Cannes, sus ocho nominaciones a los César y el Premio del Público en el SSIFF también ayudan.

La película arriesga al proponer una solución alternativa al tratamiento del autismo en menores de edad, ya que estos dos cuidadores, interpretados por Vincent Cassel y Reda Kateb, se ocupan de casos no resueltos por la medicina oficial, bajo la vigilancia y seguimiento de asuntos sociales, que ven su labor como una competencia amenazadora. Nakache y Toledano no caen en el error de santificarlos, y los presenta como seres humanos que dudan, discuten y flaquean al enfrentarse a problemas desbordantes.