Pablo CABEZA
BILBO

Dut, su densa y vital historia recogida en un libro de la editorial Banizu Nizuke

Hace diez años, más algunos meses de fragua, nacía la editorial Banizu Nizuke, proyecto de Pablo Salgado, un inquieto portugalujo que persiste, con optimismo y el justo cansancio, en la labor de edición de proyectos relacionados con la historia cultural de Euskal Herria. Su última referencia recoge de forma exhaustiva la biografía visual y escrita del revulsivo grupo de Hondarribia Dut. La voluminosa publicación se edita tanto en euskara como en español.

Xabi Strubell, Galder Izagirre y Joseba Ponce
Xabi Strubell, Galder Izagirre y Joseba Ponce

Camino de la segunda década del nuevo siglo, Pablo Salgado masculla la idea de publicar un libro sobre la historia musical de Portugalete. El trabajo es un buen tocho; es decir, un curro concienzudo que callejea por muchas de las cuestas de su pueblo, sino también por muchos lugares de la Margen Izquierda. El proyecto cuesta alrededor de 10.000 euros, una fortuna, pero en tan solo unos días consigue amortizarse.

Aquel buen debut le permite a Salgado continuar con más y más proyectos de edición, en general visuales, bajo la editorial Banizu Nizuke –nombre que deriva de una broma entre amigos surgida en sus tiempos de instituto– y que a medio plazo se convierte en un proyecto dinámico, sugerente… «Banizu Nizuke es una sociedad dedicada a la difusión de cultura contemporánea. El principal objetivo es aportar material gráfico a la cultura vasca, bien sea: a través de trabajos inéditos, como el caso de Dut; agrupando y preparando material de archivo, como fueron los proyectos Portu Sound (2009), Muskaria (2010), Willis Drummond (2017) o dando la oportunidad a artistas emergentes, como en el caso de los dos libros de fotografía que publicamos con Nagore Legarreta (2011 y 2017), la colección de fotógrafos musicales “Euskalherriko musika argazkilariak” o el proyecto “Ez dut gogoratzen” (2016) de Ixone Ormaetxe. Y todo intentado plantearlo desde un punto de vista artístico», describe Pablo Salgado.

Portugalete es su pueblo, Santurtzi su lugar de trabajo. Escenario costero desde el que el pulidor de historias comenta que el volumen de trabajo de cada mañana le resulta inabarcable, que pueden más los planes que lo que da el tiempo y las fuerzas. «No solo editamos libros –argumenta–, también archivamos documentación. En mi caso, llevo varios años con un proyecto dividido en tres volúmenes llamado “Euskal Herriko pegatak” donde se cuenta la historia de Euskal Herria a través de las pegatinas. En 2016 salió el primer volumen (1975-1979), en 2018 el segundo (1980-1989) y este 2020 saldrá el tercero (1990-1999) donde, en total, se aportan más de 10.000 pegatinas sociopolíticas. Estos libros están editados con la fundación Euskal Memoria. Además, también organizamos exposiciones, talleres y la feria BALA (Bilboko Arte Liburu Azoka)». Además este año entra en sus planes publicar un libro biográfico sobre La Secta (histórica formación de Santurtzi) que llegará acompañado de un compacto con temas nuevos. En Banizu Nizuke la palabra, la imagen y la música suelen ir unidas.

En cuanto a Dut, a Pablo le sorprende el nacimiento y desarrollo de la banda muy joven, por lo que no tiene posibilidad de verlos en directo, pero sí junto a Fermin Muguruza en el Kafe Antzokia de Bilbo, en abril de 1998. «Conocí a la banda –rebobina Salgado– con su segundo disco a través de un compañero de clase y desde el principio noté que eran diferentes al resto de grupos de aquí. Durante aquella época yo escuchaba principalmente grupos de fuera y más allá de Negu Gorriak y alguna banda más, la música local no acababa de convencerme. Al principio me costó escucharlos, venía de otro estilo de música, y estaba acostumbrado a sonidos más relacionados con el garage y el rock’n’roll», como La Secta, precisamente.

Conexiones

Escribir un libro es un trabajo arduo, de responsabilidad. En el caso de tendencias biográficas, parece que estas nunca concluyen, que siempre se queda algo que contar entre al desordenado teclado del ordenador, incluso existiendo el respaldo de los implicados, como es el caso. «He tardado cerca de dos años en acabarlo. Me he reunido con ellos (Xabi, Joseba, Galder y Eneko ) en Hondarribia en variadas ocasiones. Hemos corregido juntos los bocetos y, además, hemos tenido comunicación directa a través de un grupo de WhatsApp donde nos enviábamos cosas, podía hacerles preguntas... Puede decirse que he tenido una conexión directa para pedirles y revisar la información. Ha sido un proceso duro, porque a veces ni ellos mismos recordaban fechas o anécdotas, pero al haber trabajado conjuntamente, entre todos hemos ido recomponiendo el rompecabezas».

Otra de las intenciones del libro ha sido referenciar a personajes clave de la música vasca a través de los pies de foto. Bajo este breve apunte se explica quién es Matxitxa, Jitu, Zulu, Kata, Xabi Pery, Fernando Unsain...; cómo surgieron los primeros estudios de grabación en Euskal Herria; de dónde viene Psilocibenea o cómo se forjó Negu Gorriak. «Me reuní asimismo con gente relacionada con la banda; personas clave en la historia del grupo como Angel Katarain, Karlos Osinaga, Fermin Muguruza, Unai Radiatión, Angel Etxebeste, Kaki Arkarazo, Aitor Artza, Martxel Mariskal, Gari Garaialde... Todo un mundo de implicaciones», sentencia Pablo Salgado.

El libro cuenta con un lúcido prólogo a cargo de Gorka Erostarbe. Complemento a la narrativa histórica de Salgado: «Es un excelente prólogo porque explica perfectamente lo que te vas a encontrar en el interior. Cuando tenía bastante acabado el texto se lo pasé a Gorka antes de que escribiese el prólogo y creo que esa conexión fue muy acertada. A mí la narración es –continúa Salgado– lo que más tiempo me ha llevado, darle ritmo a la lectura para que tenga sonoridad y sea fácil de leer. Yo no soy escritor, y no he pretendido crear una obra literaria, sino contar una historia lo más amena posible, con un lenguaje ágil y relacionado con la historia que cuenta. La idea de no dejar lagunas es algo básico para que la historia funcione. Además, la idea de estructurar el libro en capítulos a través de los discos ha facilitado la historia, porque cada disco de Dut es el fin de un proyecto y el inicio de una idea nueva. Cada uno de sus cuatro discos no tiene nada que ver con el anterior».

El libro se publica en euskara y castellano. Xabi Strubell trabajó duro durante el estío del año pasado. «La labor de Xabi es encomiable, pero me gustaría señalar también la participación de Aritz Galarraga (otro hondarribiarra), que ha sido la persona que ha corregido el texto en euskara y que ha aportado mayor calidad, si cabe, a la traducción».

Dut supuso la alteración de tendencias predecibles en la escena vasca. Argumentó que otra sonoridad era posible y demostraría, de paso, que su crudeza podía ser asimilada por un público rockero acomodaticio. Su discografía alimentó un lustro, su historia sigue su curso.