Igor FERNANDEZ
Sicólogo
SICOLOGÍA PARA UNA CRISIS

Los autónomos y su fuerza

Soy autónomo y he tenido que cerrar mi local. Estoy temblando, porque no sé cuánto voy a poder aguantar así. El miedo me tiene paralizado. ¿Puedo hacer algo para pensar menos en esto o para pensar en positivo?

Xabi (Arrasate).

Xabi, la soledad habitual de los autónomos antes de esta época ahora se hace más patente. Habituados a crear el negocio de cero y a mantenerlo, el cierre también recae sobre uno mismo y sus consecuencias, a veces, incluso se viven con culpabilidad por no haberlo “previsto”.

Lo pasado pasado está y hoy empezamos a pensar que tendremos que prepararnos para un escenario que aún no conocemos, lo cual es complicado de por sí. El desamparo hace que esa preparación productiva (aún prematura) se vuelva rápidamente obsesión improductiva, en una lucha contra fantasías catastróficas.

Sin embargo, es fundamental ponerle freno.

Para empezar, el miedo hay que escucharlo pero también frenarlo, como si habláramos por dentro con alguien que nos pide saber lo que aún nadie sabe. Y es que el resultado no depende solo de lo que hagamos. Estamos inmersos en un entorno social que también se tendrá que ajustar, y del que también dependemos.

Y esto es importante: el resultado de esta situación no depende solo de mí. Por una parte podré hacer algunas cosas para disminuir el impacto pero, sobre el resto, tendré que pensar algo como «no lo sé todavía»… Porque nadie lo sabe. Todos tendremos que esperar, incluso aquellos que puedan apretarnos las tuercas, porque este es un fenómeno global.

Por otro lado, probablemente has usado tu creatividad a diario para mantener el negocio en marcha, así que esa capacidad la tienes, aunque ahora esté en pausa por el impacto. Recordar que esa capacidad no te la pueden quitar y que la podrás volver a usar para reponerte –a pesar de lo que se haya perdido– es una forma de frenar el pánico.

Ahora, calma, confía en lo que has hecho otras veces y busca apoyos, sobre todo para vaciar el miedo cuando sea demasiado. Y sí, distraerte y cuidarte también es cuidar de tu negocio.