Dabid LAZKANOITURBURU

Ucrania da luz verde a la privatización de sus fértiles «tierras negras»

Ucrania ha abierto la veda a la venta y privatización de sus fértiles «tierras negras», por las que fue conocida como «el granero de Europa». La medida, que a futuro podría dejarlas en manos extranjeras, es condición del FMI para un préstamo a su exhausta economía.

El Parlamento ucraniano (Rada) aprobó definitivamente en la noche del lunes al martes una ley que permite la privatización y venta de su fértiles tierras agrícolas (tierras negras).

En una primera etapa solo se podrán vender a sus actuales explotadores, pero en los próximos años la posibilidad será extensible a grandes empresas ucranianas y, en su caso y tras un referéndum, a inversores y a capital extranjero.

Esta polémica medida era una condición impuesta por el Fondo Monetario Internacional (FMI) para desbloquear un préstamo para la exhausta economía del país oriental europeo.

Protegidos con máscaras y guantes con motivo de la epidemia del coronavirus, 259 diputados votaron a favor de esta reforma, saludada como «histórica» por la Presidencia ucraniana.

Ecos de la era soviética

Como herencia de la era soviética, los agricultores que explotan un terreno no son propietarios de las tierras. Sus campos forman parte de un mosaico de cientos y miles de pequeñas parcelas alquiladas a los propietarios que las recibieron como propiedad cuando cayó la URSS, de la que Ucrania formaba parte como una de sus 15 repúblicas. La venta de tierras estaba prohibida y la propiedad de los terrenos estaba congelada y fragmentada.

La nueva legislación aprobada el martes asegura que fija un marco estricto al mercado de las tierras agrícolas para intentar apaciguar los miedos de la población y de los agricultores.

Así, la entrega al mercado de esas tierras ha sido postergada hasta julio de 2021 y limitada a los particulares ucranianos por un máximo de 100 hectáreas cada uno. Eso sí, a partir de 2024, las empresas ucranianas podrán adquirir hasta 10.000 hectáreas. La posibilidad de que firmas extranjeras puedan comprarlas estará condicionada a un referéndum en los próximos años.

Históricamente descrita como «el granero de trigo de Europa», Ucrania dispone de 35,3 millones de hectáreas de tierras arables que se consideran entre las más fértiles del mundo..

Una de las principales características de Ucrania son sus suelos de «tierras negras» (chernozem), especialmente aptos para los cultivos de cereales, y que configuran el paísaje de estepa de gramíneas predominante en el país.

La tierra negra es un tipo de suelo rico en humus (del 3% al 13%), además de en potasio, fósforo y microelementos. Es uno de los más fértiles para la agricultura en razón de un clima con una primavera húmeda, un verano muy seco y un invierno fuerte con heladas y nieves.

Los defensores de su privatización sostienen que la productividad de estas tierras es muy baja por falta de inversiones.

Condición del FMI

Esta es una, pero no la única condición del FMI para desbloquear un préstamo de 10.000 millones de dólares.

Además, Kiev debe aprobar una ley, adoptada en primera lectura, que impedirá anular la nacionalización del primer banco del país, Privatbank.

Esta anulación es contestada por su antiguo propietario, el poderoso oligarca Igor Kolomoïsky, considerado como próximo del presidente, Volodimir Zelensky.