Estos días tengo mucha necesidad de estar informada sobre lo que está ocurriendo con el coronavirus. A la vez, las noticias me generan mucha tristeza y algunos días me voy a la cama angustiada. Mi pregunta es ¿cómo podemos llevar lo de la información para no estar desconectados del problema pero que tampoco nos mine tanto? Saludos y un abrazo.

Mari (Algorta)

Kaixo, Mari. Lo que me cuentas es que, para ti, está siendo demasiado. A veces, cuando una situación nos impacta emocionalmente, es como si nuestra mente se sobrecargara y hubiera que distanciarse un poco para tomar aliento antes de volver a afrontarla. A veces, ver información constantemente de lo malo que está pasando a nuestro alrededor nos impide ese respiro que necesitamos. La información que vemos o escuchamos también puede traumatizar si vuelve a apelar una y otra vez a nuestro temor o nuestro desbordamiento. Los medios tienen que informar de forma exquisita para dar solo información relevante para una crisis nueva para todos pero lejos de alarmismos innecesarios o de ideologías. Si no lo hacen o si nos resulta excesivo, podemos limitar la atención que ponemos, escogiendo solo un par de ocasiones al día en las que ver las noticias o limitarnos a leer el periódico. Este no es el tipo de crisis que exija una reacción inmediata y radical para protegernos, sino un afrontamiento más mantenido en el tiempo, así que no pasará nada si veo las noticias mañana por la mañana en lugar de esta noche. Por otro lado, tampoco necesitamos estar hablando de esto todo el tiempo, ni siquiera para quejarnos de los que deciden, variar de tema no implica que nos dé igual, ni nos estaremos perdiendo la acción mágica que nos salve de esta amenaza. No, estaremos ganando fuerzas y llenándonos de otras sensaciones importantes. Lo que estamos haciendo está sirviendo, se viene avisando y recordando, y las consecuencias más vale no tenerlas todo el día en mente, no podemos asumirlas individualmente, es algo que tenemos que hacer entre todos.