Miren ARTETXE
LIBROS PARA UNA CUARENTENA

Realismo, magia y realismo mágico

La historia de esta novela se ubica en Antaño, un lugar imaginario situado en el centro de Polonia, un microcosmos por el que transitan sus peculiares habitantes y, con ellos, alemanes que entran a saco y cosacos invasores, almas en pena que se creen vivas, ángeles de la guarda y hasta el mismísimo Dios. Una aldea que es testigo también de dos guerras mundiales y de la mella que estas hacen en sus habitantes, que ven –los que sobreviven– cómo sus vidas cambian y sus sueños se desvanecen. La novela comienza en 1914, cuando Michal es llamado a filas, y finaliza con el siglo. Hay nacimientos, amoríos, amistad, violencia, dignidad, traiciones, envejecimiento y muertes. Mil y una historias que se entrecruzan en un todo.

Esta podría ser la sinopsis de esta novela coral estructurada en capítulos cortos. Pero hay ocasiones, y esta es una de ellas, en las que con solo un resumen no podemos vislumbrar lo que encontraremos en sus páginas, en las que brillan la desbordante imaginación de la autora y –muy importante– un lenguaje sorprendentemente sereno, incluso en las escenas más crudas. En ella hay realismo, magia y realismo mágico.

Olga Tokarczuk era prácticamente una desconocida aquí cuando en 2019 recibió el Nobel de Literatura. Solo dos de sus novelas habían sido traducidas al castellano, aunque una de ellas, precisamente esta, estaba descatalogada. Tras el Nobel, Siruela ha reeditado “Sobre los huesos de los muertos”; Anagrama ha publicado, además de esta, “Los errantes”; y a lo largo 2020 verá la luz en euskara “Goldatu hildakoen hezurretan zehar”, de la mano de Elkar.