El Eibar necesita puntos para certificar la permanencia que ha dejado encarrilada con los ocho que ha sumado en la reanudación de la Liga. Una buena racha que se vio cortada el jueves y que ha vuelto a reducir a seis puntos su ventaja sobre el descenso. Seis son los puntos que le saca el equipo azulgrana al Mallorca y siete al Leganés –Alavés y Celta siguen clavados en los 35 que tiene el propio Eibar–, precisamente el próximo visitante de Ipurua, en un partido cuya trascendencia es evidente.

Pero antes de recibir a los madrileños, el Eibar visita al Sevilla, una cita que José Luis Mendilibar no quiere hipotecar pensando en la siguiente. Y es que si incluso sin despistes será complicado rascar en el Sánchez Pizjuán, la misión será imposible si los guipuzcoanos no se centran por completo en un rival que también llega necesitado, aunque por motivos bien diferentes, y con la calculadora en la mano. Sólo la victoria permitirá a los andaluces mantener a tiro la tercera plaza y seguir dependiendo de sí mismos para aferrar la cuarta.

Mendilibar reconoce que, vista la clasificación, el rival y el escenario –en el que se prevén 29 grados a la hora de inicio del partido–, un punto ya sería un buen botín pero asegura que «vamos con la intención de hacer un buen partido y a ganar. Estamos compitiendo. El último partido fue el peor pero en los anteriores hemos competido bien en todos y en Sevilla también lo intentaremos».

El técnico adelanta «cuatro o cinco cambios», pensando «en el partido del Sevilla, no en el del Leganés», explica. Y eso que cree que «las rotaciones y el trabajo de recuperación están funcionando» y ve a su equipo todavía fresco. «Creo que lo estamos haciendo bien y espero que eso nos permita hacerlo bien hasta final de temporada».