El navarro del Mitchelton afronta su decimonovena gran vuelta después de haber acabado todas las que ha disputado entre los 25 primeros, seis en el Top’10, lo que demuestra una regularidad que también confirma esta temporada al acabar entre los diez primeros las dos últimas pruebas que ha disputado en Burgos (décimo) y Polonia (noveno) y ser decimotercero en Andalucía.

¿Ha acabado entre los primeros todas las pruebas que ha corrido esta temporada en una confirmación de la regularidad que siempre le ha caracterizado?

La de Andalucía queda lejos, no cuenta. En las últimas dos carreras me he encontrado bien, en una buena forma al volver tras estar tanto tiempo parado. Me da confianza, me he visto bien y a ver si puedo seguir esta línea.

Y eso que en algunas ha trabajado para sus compañeros, como para Simon Yates, que acabó por detrás en la general...

Son circunstancias. Simon está para el Giro y son momentos diferentes. Tampoco estaba a tope. Era Esteban el que estaba disputando en Burgos, pero tampoco le doy importancia a eso. Con lo que me quedo es que me encontré bien y llego con ganas aquí.

¿El Mitchelton tiene la intención de disputar la general con Adam Yates o Esteban Yates o se centrarán solo en buscar etapas con libertad para todos los corredores?

El equipo tampoco tiene mucha intención de disputar la general. El año pasado ganamos cuatro etapas, salió bien, y la intención será buscar triunfos parciales. Los dos tienen calidad suficientes para ganar etapas en una gran vuelta. Iremos viendo día a día cómo nos encontramos, cómo va la carrera y ver cómo están los demás y cómo afrontar las etapas. Lo más importante es el rendimiento de cada uno, que estemos todos bien y luego iremos viendo cómo vamos. Afrontamos de esa manera la carrera y luego la libertad te la tienes que ganar. Te la dan las piernas, que son las que te pueden permitir meterte en las fugas e intentar hacer cosas. A ver cómo va la carrera...

¿Eso le puede permitir hacer una buena general, también ayudado por la búsqueda de escapadas en las etapas de montaña?

No es la idea y tampoco me quiero meter a pelear la general. Aunque todo vaya muy bien es difícil entrar entre los diez primeros y ni me lo planteo al principio. Al final, si ganas tiempo en alguna fuga y te metes ahí en la tercera semana puedes cambiar de objetivo y luchar por otras cosas, pero el equipo está pensando más en buscar etapas. Ésa será la estrategia y a ver cómo lo hacemos.

¿Tras lograr etapas en Vuelta y el Giro buscará ganar en el Tour para entrar en el grupo selecto de ganadores en las tres grandes?

Está claro que ganar en el Tour sería lo máximo a lo que puedo aspirar. Aunque no me obsesiona, me haría una gran ilusión, pero no me vuelvo loco. Con lo que he conseguido estoy contento. Estoy con tranquilidad de hacer las cosas lo mejor posible y si viene la victoria mejor. Si no, por lo menos pelearla. El objetivo es difícil, pero por lo menos quiero estar en la pelea en algunas etapas y lo intentaré.

¿Cómo ha vivido la incertidumbre con el equipo tras el acuerdo con la Fundación Manuela? ¿Le dará tranquilidad que se haya roto y la renovación de Simon Yates tras garantizarse la continuidad del equipo hasta 2022?

Pasó lo que pasó. Ha sido una época difícil para todos, pero el sponsor ya ha anunciado que sigue dos años más. Tampoco me vuelvo muy loco con estos temas. A lo que no está en mis manos tampoco le doy tanta importancia. Me he centrado en lo mío, en estar bien sin pensar en lo que pasaba con el equipo o con los ciclistas. Tengo un año más firmado y eso te da una estabilidad. Si terminara el contrato estaría más nervioso, pero lo que me preocupa es estar bien y hacer las cosas bien. Si haces eso todo lo demás viene más fácil.

¿Y qué le parece todo lo que rodea al Tour con el coronavirus?

Casi lo que más me preocupa es que haya algún problema y te tengas que ir para casa estando bien de salud. Este virus afecta de diferentes maneras a todos, lo importante es estar bien de salud y ojalá haya suerte y no pasen cosas, pero te genera esa incertidumbre porque es algo que no está en tus manos y puede cambiar todo.

¿Que la carrera se corra en septiembre y no en julio y que los corredores no hayan podido seguir los planes de entrenamientos y competiciones habituales puede provocar sorpresas?

Yo creo que será parecido, aunque puede haber sorpresas porque quizás sí es una situación nueva. Pero la situación nueva es para todos, todos hemos trabajado parecido y los que estamos aquí en condiciones normales hemos llegado bien. Al no disputarse en julio esperemos que haga menos calor, quizás afectará menos, pero será algo parecido. Sí creo que se correrá diferente por la incertidumbre ésta de que no sabemos ni si llegaremos a París. Todos jugarán a arriesgar un poco más.

¿Es un Tour muy montañoso, ideal para sus características?

Me gusta, es el mejor de los últimos años para mí. Desde las primeras etapas son bastante complicadas y, cuanta más dureza haya, mejor para mí,. Me gusta el recorrido porque va a dar opciones para las fugas. A ver si tenemos un poco de suerte, las piernas acompañan y podemos estar luchando adelante.

¿Qué espera del duelo entre Jumbo e Ineos, puede dificultar el éxito de esas escapadas?

No sé cómo va a ir la carrera. Son dos equipos muy potentes y no sé si irán todos los días a ganar las etapas. Se irá viendo cómo pasan los días y la gente que pierde tiempo en la general. Es difícil predecir qué puede pasar, pero puede que la carrera vaya bloqueada y que jueguen a ganar como pasó en Dauphiné y salte todo por los aires.

¿Les ve como favoritos o piensa en otros candidatos?

Está claro que Roglic, Dumoulin y Bernal son los máximos favoritos. Luego hay muchos nombres que pueden estar peleando.

Los corredores que han participado en Dauphiné se han quedado asustados del ritmo al que se ha corrido. ¿Pueden acusar algunos ese ritmo en la última semana del Tour?

Estamos corriendo a un ritmo muy alto todas las carreras. Se ve que la gente está con ganas. En la Vuelta a Burgos desde el primer día hubo guerra y lo mismo en el Tour de Polonia y Dauphiné. Esta incertidumbre que tenemos todos puede llevar más a intentar ganar que a defender y la carrera vaya más rápida o más dinámica. Puede ser incluso mejor para el público.