Daniel GALVALIZI
MADRID

Los voluntarios sabrán en próximos días cuándo retomarán las pruebas

La gigante farmacéutica AstraZeneca envió ayer un mensaje a los voluntarios que estan probando su vacuna contra el coronavirus, la que están desarrollando en colaboración con la Universidad de Oxford, informando de la situación creada y prometiendo que «en los próximos días» anunciará cuándo se retoman las pruebas, tras el ingreso en un hospital de un joven británico que había sido vacunado.

Uno de los voluntarios del proyecto en Sudáfrica, el argentino Pablo Andrés Berra, enseñó ayer a NAIZ el mensaje que recibió a primera hora por parte de AstraZeneca. En diálogo telefónico desde su casa rural en Gerhardsville, un pequeño pueblo ubicado casi a mitad de camino entre Johannesburgo y Pretoria, Berra explicó que se enteró de la suspensión de las pruebas por los medios de comunicación.

«Anoche lo leí en un portal de noticias y no teníamos ninguna información. Contacté con algunos voluntarios y nadie sabía nada», afirmó. Ya por la mañana, el laboratorio contactó con él a través de un mensaje donde se decía que ««después de un evento médico experimentado por un participante involucrado en el estudio de la vacuna ChAdOx1-CoV19 en el Reino Unido, el comité independiente de monitoreo de datos y seguridad (DSMC) recomendó que todos los estudios que supervisa pausen la vacunación adicional, para permitirle realizar una revisión exhaustiva del caso. El estudio sudafricano también está supervisado por el mismo comité de seguridad y, en consecuencia, detendremos las vacunaciones».

Algo «rutinario»

Asimismo, en la comunicación se anunciaba que «los participantes que estén programados para recibir una primera o una segunda dosis de la vacuna serán informados durante los próximos días sobre cuándo podemos comenzar a revacunar según la recomendación del DSMB». «Agradecemos su disposición a participar en el estudio y, como indica este curso de acción, su seguridad sigue siendo una preocupación primordial para los investigadores. Por favor contáctenos para cualquier pregunta», concluye el mensaje de la multinacional para los voluntarios.

Las pruebas de la fase 3 de la vacuna impulsada por la Universidad de Oxford y que cuenta con un millonario apoyo de fondos públicos por parte de Londres, involucra a más de 30.000 participantes en EEUU, Gran Bretaña, Brasil y Sudáfrica.

En su comunicado oficial AstraZeneca busca transmitir tranquilidad y recuerda que se trata de «la segunda vez» que se suspende el ensayo de la vacuna contra el coronavirus, apostillando que «tales eventos son rutinarios en los ensayos importantes».

Tal y como se explica en la página anterior, un voluntario británico de 18 años fue hospitalizado el martes a causa de una mielitis transversa, un trastorno poco común del sistema nervioso, que se origina por la inflamación de la médula espinal.

Otro voluntario pide calma

Otro de los participantes en los ensayos que ha hecho declaraciones sobre lo ocurrido es Joan Pons, quien trabaja como enfermero en Inglaterra y recibió la vacuna a finales de junio. En un video subido a las redes sociales y enviado a sus contactos, ha pedido calma y que los medios no se lleven por «rumores».

«Un voluntario, de los más de 30.000, ha ingresado al hospital, pero no sabemos por qué. Puede ser por cualquier cosa. Todos tenemos una tarjeta que si nos pasa cualquier cosa tenemos que comunicarlo. Lo que dicen los protocolos es que hasta que no se sepa la causa (de la hospitalización de un participante), es que tenemos que parar, aunque a lo mejor no tenga nada que ver con la vacuna. Eso forma parte de cualquier ensayo clínico», explica en el video.

Pons afirma que «lo normal es parar, porque la seguridad de las personas es la prioridad, por encima de todo». «Por tanto, no hay que alarmarse, hay que esperar. Ha sido solamente un voluntario el que ingresó en el hospital pero no se sabe si tiene algo derivado de la vacuna», insiste. El enfermero señala además que en la fase 3 de las pruebas la empresa y la Universidad de Oxford «han ampliado el tipo de voluntarios a mayores de 65 años y a personas con enfermedades crónicas». «Pido paciencia y calma, parar los ensayos es lo normal y lo que se tiene que hacer», subraya.

En entrevista publicada por este periódico en julio pasado, Berra había relatado que los médicos con los que tenía contacto le habían comentado que ya había «decenas de millones de dosis listas en la India, donde tienen laboratorios que trabajan de lunes a lunes para producirlas y las tienen almacenadas para luego salir a venderlas al mundo apenas puedan».