Jon ORMAZABAL
BALONCESTO

Muchas más dudas que certezas sobre el parqué

Baskonia, Bilbao Basket y Gipuzkoa Basket transitarán por las tres velocidades de una ACB condicionada.

El balón naranja echará a rodar este sábado en la Liga ACB más atípica, con muchas más dudas que certezas, tanto en el desarrollo de la competición como en la respuesta que cada plantilla pueda dar a una temporada completamente condicionada por la pandemia sanitaria y que, de momento, arranca sin público en las gradas.

Y esa misma palabra, ‘incertidumbre’, podría ser la que mejor describa las aspiraciones de los equipos vascos, inmersos en las tres velocidades en las que discurrirá la temporada, la de los aspirantes al título, los que buscan los play-offs y el de los que ansían la salvación.

Su competitividad y su condición de vigente campeón otorgan al Baskonia la licencia de ser incluidos en este primer grupo junto con los transatlánticos Barcelona y Real Madrid. Dusko Ivanovic volverá a ser la estrella y referente de un bloque en el que, por cambiar, han cambiado hasta de nombre. El TD Systems Baskonia defenderá el título con medio equipo nuevo y una combinación de jugadores contrastados y jóvenes promesas.

El Baskonia ha perdido a referentes contrastados como Shields, Granger, Garino y, sobre todo, el hombre sobre el que ha pivotado todos sus proyectos durante los últimos años, Toko Shengelia. El alero Rokas Giedraitis parece el destinado a asumir el rol anotador del georgiano, aunque todo apunta a una labor mucho más coral, con las aportaciones de Alec Peters, el ala-pívot que ocupará el vacío de Toko, el más regular de la pretemporada, demostrando su gran mano y su inteligencia sobre la cancha. Jekiri releva en labores intimidatorias a su compatriota Eric y gran parte del éxito azulgrana pasará por el crecimiento de jóvenes como Tadas Sedekerskis, el base letón Arturs Kurucs y el escolta estonio Sander Raieste.

Lo que parece irrenunciable es el estilo, con un juego físico que, apoyado en la intensidad defensiva, tratará de correr a tumba abierta.

El difícil reto de mejorar

Bilbao Basket estrena presidenta, Isabel Iturbe, en un proyecto que arranca con la complicadísima misión de seguir creciendo tras la fantástica temporada en su vuelta a la ACB.

La pareja Pueyo-Mumbrú se ha puesto muy alto el listón y, tras la marcha de Axel Bouteille a mediados del curso pasado, se puede hablar de continuidad. Así, la columna vertebral del equipo la compondrán el base francés Jonathan Rousselle, el nuevo capitán, el escolta estadounidense Jaylon Brown, el ala-pívot lituano Arnoldas Kulboka y el pívot checo Ondrej Balvin. El alero polaco Jaroslaw Zyskowski podría completar ese quinteto inicial, con una interesante segunda unidad con Hakanson, Serron, Alex Reyes, Kingsley, Aaron Jones y Felipe dos Anjos. Habrá que ver cuánto de grande es el hueco que dejan Lammers o Sulejmanovic.

Y si hablamos de incertidumbre, qué decir de un Gipuzkoa Basket en el que lo único claro es que la permanencia en una categoría que tanto ha costado, en la cancha y los despachos, es el único objetivo.

Mikel Motos, Xavi Oroz, Julen Olaizola y Johnny Dee son los únicos que repiten a las órdenes de Marcelo Nicola. Con las limitaciones, económicas y temporales, el equipo guipuzcoano ha confeccionado un roster sin demasiado bagaje ACB que habrá que ver cómo se amoldan, tanto a un equipo a medio hacer como a la competición.

Valencia quiere estar un poquito más cerca

Esta ACB de 19 equipos vuelve a partir con dos claros favoritos al título, Barcelona y Real Madrid, dos proyectos que escapan a la lógica del baloncesto a nivel del Estado español. El Barça ha seguido reforzándose, ahora con Sarunas Jasikevicius en el banquillo y con el greco-estadounidense Nik Calathes a los mandos del equipo, mientras que el Madrid vive una especie de compás de espera agobiante por la posible marcha a la NBA de Facundo Campazzo y Gabriel Deck.

En un mercado con muchos cambios pero poco dinero, el Valencia parece el proyecto que mejor se ha reforzado en gran parte porque su vuelta a la Euroliga pasa por hacer un gran papel en la competición continental. Asegurada la continuidad del bloque del año pasado, Ponsarnau cuenta con refuerzos de lujo, Hermannsson, Kalinic y Derrick Williams, sin despreciar a Prepelic o Pradilla. Unicaja repite prácticamente su proyecto y la Penya parece seguir creciendo con Tomic y Ribas.J.O.