BEGIRADA

Está en juego quién paga la crisis

La consejera del Gobierno Vasco Arantxa Tapia quiere «invertir más en la formación de los trabajadores», y para ello no ha propuesto un impuesto sobre las grandes fortunas, por ejemplo, sino una bajada de sueldos. La consejera, que en 2018 cobró 95.458,87 euros del erario público, no quiere que los que más tienen hagan un mayor esfuerzo frente a la crisis, quiere que la paguemos los trabajadores.