Alberto CASTRO
Al cierre

Cuatro semanas en rojo

El Ibex no levanta cabeza. Sigue sin contar con argumentos positivos que le conduzcan a la senda de la reacción, pese a los intermitentes escarceos alcistas promovidos por los bancos. Ha encadenado su cuarta semana consecutiva a la baja, después de saldar las últimas cinco sesiones con una pérdida acumulada del 4,35%, su peor balance desde julio. Este nuevo retroceso amplía su caída anual hasta el 31%. Ayer caía un 0,23%, hasta los 6.628,30 puntos, renovando mínimos desde mayo.

Las principales bolsas europeas tampoco pudieron escapar de los descensos. Los peores índices fueron los de Fráncfort y Milán, con recortes superiores al 1%, mientras París restaba un 0,69%. Solo Londres (+0,34%) acabó en verde. Por su parte, Wall Street subía a la hora del cierre en Europa, tras haber comenzado la sesión con pérdidas. En ese momento, se destacaba el avance del Nasdaq 100, superior al 1%, frente al 0,40% en el Dow Jones y el 0,60% en el S&P 500.

Los mercados se están encontrando con enormes dificultades para vislumbrar un recuperación sostenida de la economía. El goteo de restricciones que se prepara en Gran Bretaña y el Estado francés dibuja un panorama sombrío. Y es todavía peor en el Estado español, donde las medidas para controlar la pandemia, sobre todo en Madrid, pueden llevar a su economía a un callejón sin salida.

Dentro del Ibex, el peor fue Ferrovial (-3,93%), perjudicado por rebajas de recomendaciones. Los bancos volvían a cobrar protagonismo por el lado negativo. Caixabank se dejó un 3,54%; Bankia, un 3,40%; Sabadell, un 3,21%; y Bankinter, un 2,70%. Mejor les fue a Santander y BBVA, que subieron un 0,23% y un 0,35%. Los títulos de PharmaMar (+3,49%) lideraron las subidas.