Manex ALTUNA
BILBO
ATHLETIC, CAMPEÓN DE LA SUPERCOPA 2021

La trompeta de Villalibre y la fuerza del golazo de Williams

Los dos delanteros se convierten en los grandes protagonistas de la victoria en la final al marcar en los momentos decisivos y por todo lo que representan para el proyecto del club.

Resaca dulce para todos los hinchas rojiblancos tras añadir la tercera Supercopa al pamarés del club. La imagen de Asier Villalibre celebrando el triunfo con la trompeta en mano quedará grabada para siempre en el recuerdo de los aficionados. Es la foto que describe la alegría desbordante que se respira en el Athletic.

De Marcos aseguraba en la recepción institucional en la diputación que es la imagen «de lo que somos, un grupo de amigos que hemos competido y ganado» ante equipos del nivel de Real Madrid y Barcelona. «Es una demostración del orgullo que se siente representando al Athletic con esta filosofía», añadía el alavés.

De Marcos y Villalibre forman parte del grupo musical Orsai con otros compañeros de vestuario como Balenziaga, Vesga, Dani García y Lekue. Es la demostración de aquellas palabras de Aduriz sobre la cuadrilla. ¿Habrá algún equipo en el que ocurra algo similar? El búfalo se ha ganado un hueco en en el corazón de los aficionados por su nobleza y naturalidad, además de salvar al equipo en la final cuando el tiempo se agotaba.

Un gol que hace justicia con un delantero al que le ha costado mucho contar con oportunidades en el primer equipo. Y es que la intentona para fichar a Llorente delataba la falta de confianza en Villalibre. También en Williams, que en La Cartuja anotó el mejor gol de su carrera y que le puede servir para salir fortalecido. Ambos son indispensables para este Athletic por todo lo que representan, dentro y fuera del campo, cada uno con sus distintas características personales.

La importancia de Marcelino

El Athletic mantiene un arraigo con su tierra e incorpora a su filosofía a las nuevas generaciones que llegan a este país. Es un equipo que se nutre de su pueblo y así llegaba a Lezama Iñaki Williams, hijo de inmigrantes africanos que encontraron la forma de salir adelante en Euskal Herria. El jugador recibió el nombre de Iñaki en homenaje a la persona que les ayudó y les llevó a Bilbo. Allí nació el delantero que después creció en Iruñea. Williams es consciente de sus raíces y siempre recuerda las dificultades que ha tenido que superar para llegar a la élite.

Con Marcelino se ha revitalizado al igual que su compañero Muniain. El estilo que propugna el asturiano favorece sus cualidades y ambos han completado un gran torneo, después de que en el inicio de la temporada hayan pasado desapercibidos en muchos partidos.

Williams es un jugador franquicia para el Athletic. Quizá no sea el más efectivo y no consiga tantos goles, pero no hay ninguna duda de que es el más desequilibrante. Los defensas rivales sufren muchísimo para detenerle y no hay un sustituto de sus características. Puede que en un futuro próximo sea su hermano pequeño Nico. Compartir la camiseta con él es otro de sus sueños y, cada vez queda menos, viendo el rendimiento que está ofreciendo en el filial.

Paseo institucional con el trofeo y entrenamiento en Lezama

Una delegación del Athletic encabezada por el presidente Aitor Elizegi, el entrenador Marcelino García Toral y los cinco capitanes −Muniain, De Marcos, Balenziaga, Raúl García y Williams− fue homenajeada por el Ayuntamiento de Bilbo y la Diputación de Bizkaia nada más regresar desde Sevilla. Los actos se celebraron a puerta cerrada y manteniendo las distancias por la pandemia. A pesar de ello, decenas de seguidores rojiblancos les recibieron con cánticos y también les dieron la bienvenida en el aeropuerto de Loiu. Presidente, entrenador y capitanes quisieron agradecer todo el apoyo recibido y mostraron su felicidad por el título.

Eso sí, Marcelino y los jugadores subrayaban que quieren conseguir más éxitos esta misma temporada y por la tarde entrenaron en Lezama. El jueves visitan a Ibiza en Copa, un rival de Segunda B que ya ha eliminado al Celta.M.A.