GARA
DONOSTIA

Los fuegos permanecían estabilizados a la espera de que la lluvia los extinguiera

Estabilizados y a la espera de que la lluvia permitiera extinguirlos. Así se encontraban anoche los focos del incendio desatado el sábado en Bera y que se extendió a Gipuzkoa y Lapurdi avivado por las fuertes rachas de viento. Esa lluvia, que empezó a caer cuando ya había anochecido, permitiría levantar el Nivel 2 del Plan de Emergencias para Riesgo de Incendios forestales activado la víspera.

El Gobierno de Iruñea informó a útima hora de la tarde que el incendio aún no estaba controlado porque se mantenían aún puntos calientes a partir de los que podría reavivarse, sobre todo en el límite de Gipuzkoa. En el lado guipuzcoano, los bomberos daban también por estabilizado el fuego, que aún mantenía activos dos focos en la zona del monte Erlaitz. Precisaban que ya no existía riesgo para los caseríos cercanos y que se habían quemado 400 hectáreas.

En el caso del foco de Lapurdi, la situación se daba por controlada por la mañana. El fuego afectó a 750 hectáreas en la zona entre Biriatu, Azkaine y Urruña.

Una valoración con cálculos aproximados realizada a primera hora de la mañana por el Ejecutivo de Iruñea cifraba en 1.600 las hectáreas quemadas por un incendio que, el alcalde de Bera, Aitor Elexpuru, opinó que «ha sido intencionado; iniciado con mala intención».

La persistencia de fuertes rachas de viento impidió la intervención de medios aéreos, según se indicó en la reunión que mantuvo el Comité Asesor de Emergencia por la mañana y en la que participó de forma telemática la lehendakari, María Chivite. En el encuentro se destacó la colaboración «constante y efectiva» de recursos de Nafarroa, Lapurdi y Gipuzkoa, lo que permitió «distribuir los efectivos para atacar los diversos frentes».

Ese trabajo conjunto también fue puesto de relieve por el vicelehendakari de Lakua, Josu Erkoreka, quien indicó que Urkullu y Chivite estuvieron en contacto.

«Afortunadamente está estabilizado, se espera que el viento empiece a amainar y sobre las 21.00 horas empezará a llover fuerte en esta zona de Irun limítrofe con Iparralde y Navarra», manifestó Josu Erkoreka desde Behobia.

Previamente, ya se había restablecido el tráfico hacia esa zona desde Iruñea. La N-121-A, que registró problemas circulatorios por la presencia de camiones. que fueron evacuados por la Policía Foral y la Guardia Civil, quedó abierta de nuevo.