Natxo MATXIN
EUROCOPA 2020

Italia se estrena ratificando su actual estado de gracia

Los de Mancini le dieron continuidad a su inmaculada trayectoria en la fase de grupos superando a Turquía.

TURQUÍA 0

ITALIA 3


Gracias a un segundo periodo con bastante mayor eficacia, Italia confirmó en el partido inaugural su inmaculada trayectoria de la fase de grupos. Presionando muy arriba y llevando la iniciativa en todo momento, la escuadra azzurra dejó claro que llega con una nueva hornada de jugadores dispuesta a revalidar pretéritos éxitos.

Monólogo transalpino en la primera parte, con una Turquía que, a medida que fueron pasando los minutos, se encerró prácticamente en su área. Sin embargo, los pupilos de Mancini apenas sacaron partido de esa defensa numantina de su rival, a excepción de un cabezazo de Chiellini al que respondió con una gran estirada el cotizado guardameta Çakir.

Italia llegó fundamentalmente por la banda izquierda, donde Spinazzola e Insigne supieron entender y superar a sus marcadores, pero sin acierto en los metros finales. El delantero del Nápoles lo intentó hasta en dos ocasiones con sendos disparos a colocar que no encontraron la rosca suficiente como para alterar el marcador.

Turquía prosiguió con su catenaccio hasta el descanso, demostrando el porqué solo había encajado tres goles en la fase de clasificación, aunque su plan estuvo a punto de venirse abajo por varias manos dentro del área, una bastante clara al filo del receso que el VAR no vio como punible.

La estrategia turca se derrumbó finalmente al inicio de la segunda parte con un autogol de Demiral, que provocó el hundimiento de una escuadra turca de la que se esperaba bastante más. Con el electrónico a su favor, Italia ya jugó a placer, disfrutando de los huecos que fue dejando el conjunto otomano. Los aprovecharon los dos futbolistas más determinantes del equipo transalpino, Immobile e Insigne, con sendas dianas rematando dentro del área rival.

Compensan a Bilbo con dos finales

Según informaron Lakua, la Diputación de Bizkaia y el Ayuntamiento de Bilbo, la UEFA compensará a la ciudad vasca con dos finales europeas –Europa League y Champions femenina– y 1,3 millones por la pérdida de la sede de la Eurocopa.

Estas tres instituciones confirmaron que durante estas semanas han estado negociando con el organismo futbolístico a la búsqueda de un acuerdo –también preparaban una demanda judicial por incumplimiento unilateral del contrato, caso de no llegar a buen puerto los contactos–, que finalmente se ha materializado.

Exigían un «resarcimiento por la pérdida de un evento internacional que hubiera supuesto un importante impulso económico en la ciudad, territorio y país, así como por poner en duda la contrastada y larga experiencia y capacidad de las autoridades vascas para la gestión y organización de eventos de alcance internacional».GARA