Joseba ITURRIA
DONOSTIA
MUNDIALES DE FONDO EN CARRETERA EN FLANDES

Alaphilippe revalida el título con una exhibición en la parte final

El corredor del Deceuninck atacó en la penúltima vuelta y recorrió en solitario los últimos 17 kilómetros tras no poder rematar Van Aert y Colbrelli el trabajo de las selecciones belga e italiana. Dylan van Baarle y Michael Valgren completaron el podio. Aranburu abandonó tras una caída y Gorka Izagirre y Erviti acabaron en los puestos 42º y 43º.

Julian Alaphilippe logró su segunda victoria consecutiva en el Mundial de fondo en carretera tras ser el más fuerte en Louvain (Flandes) en una carrera en la que hicieron estrago los 268,3 kilómetros disputados a una gran velocidad, 45,1 de media.

El corredor del Deceuninck provocó la selección de diecisiete corredores que se disputaron las medallas a 55 de meta y se marchó en solitario a falta de 17 tras atacar en las últimas cotas de la penúltima vuelta y aumentar progresivamente su ventaja para poder celebrar la victoria al llegar con 32 segundos a sus perseguidores.

Por detrás se marcharon Neilson Powless, Dylan Van Baarle, Michael Valgren y Jasper Stuyven, que se limitaron a pelear por la medalla de plata que consiguió el holandés por delante del danés, con lo que la selección belga se quedó sin medalla pese a tener la mejor selección al equivocarse al apostar por la baza de Van Aert, que solo fue undécimo, y la de Jasper Stuyven, que solo pudo ser cuarto, tras sacrificar a Remco Evenepoel al ponerle a trabajar en el grupo tras tirar por detrás cuando estaba por delante.

Movimientos de Evenepoel

La selección belga quiso endurecer el Mundial con Evenepoel y a 170 de meta lo metió en un corte peligroso de quince corredores con algunos del nivel de Roglic, Cort Nielsen, Asgreen, Démare, Cosnefroy, Bissegger, McNulty e Imanol Erviti, que obligaron a Italia a trabajar por detrás para anularlo.

Después la selección belga intentó marcar un ritmo alto para reducir progresivamente el pelotón en un Mundial que solo presentaba 2.250 metros de desnivel, pero que resultó durísimo por la batalla que volvió a presentar Evenepoel al meterse a 88 kilómetros de meta en otro grupo en el que los más fuertes fueron el flamenco Madouas, Van Baarle, Bagioli y Powless.

A pesar de que era un buen corte, la selección belga tiró por detrás y a falta de 55 Alaphilippe seleccionó el pelotón y los principales favoritos formaron el grupo de diecisiete que se disputó la carrera. Evenepoel y Bagioli se sacrificaron para Van Aert, Stuyven y Colbrelli y la selección francesa no trabajó pese a tener también tres corredores y Madouas preparó el ataque de Alaphilippe para marcharse en solitario en la penúltima vuelta.

 

«No me imaginaba que me iba a ir solo»

Julian Alaphilippe desveló tras su victoria la estrategia que discutió con el seleccionador Thomas Voeckler cuando bajó al coche antes de lanzar sus ataques: «Tenía la consigna de endurecer la carrera y ver qué pasaba y que Florian Sénéchal se concentrara en una llegada al sprint. Pero no me imaginaba un escenario así, ni que iba a hacer una vuelta solo. El año pasado fue un sueño, fue difícil, pero al final lo conseguí. Sabía lo que había hecho entonces y he venido con mucha motivación para volver a repetirlo. Estoy muy feliz».

El gran favorito, Wout van Aert, reconoció que «era imposible seguirle. Simplemente no tenía las piernas para hacerlo. Soy humano». Remco Evenepoel, el sacrificado para jugar la baza de Van Aert, dijo que «Julian jugó la buena estrategia. Era necesario atacar a Wout en varias ocasiones porque él es el más rápido del mundo sobre un recorrido como este. La selección francesa ha hecho lo que debía». La belga no.GARA